Cuando lees en las guias y paginas web o cualquier otro medio sobre Thailandia, lo primero que se menciona es la sonrrisa y generosidad de los Thailandeses. Como en casi todos los países del sudeste asiático, normalmente suele ser verdad pero también, normalmente no lo experimentas hasta que llevas varias semanas en un mismo sitio. Cual fue mi sorpresa cuando nada mas llegar me tope con esta realidad que hace de este país un lugar perfecto para viajar y en el cual muchos se quedan a vivir. Todo empezó cuando llege a Phuket desde Jakarta. Phuket es la ciudad mas turística del sur y muy alejada de lo que voy buscando así que armado con mis 20 kg, de mochila decidí ir del tirón hasta Pai, un pueblecito a mas de 2.000 km. en el norte, justo antes de la frontera con Birmania y en situada en el Triangulo de oro.Cuando llege a la estacion de autobuses de Phuket directo desde el aeropuerto estaba por salir el ultimo autobús dirección a Bangkok (12h.) y como no estaba completo. Asi que tube que negociar y negociar hasta que por fin me dejaron viajar en la cabina con los conductores. Increible viaje donde el dormir era mas difícil que comunicarse con los conductores, que no hablaban casi nada de Ingles. Aquí ya intuía la generosidad con la que me recibió Tailandia.Una experiencia nada recomendable pero que a mi me apasion. Ademas necesitaba movimiento y acción después de un mes sedentario en Java.La llegada a Bangkok fue espectacular del tirón sortee a todos los buscavidas que se apiñan a la llegada de los turis-bus para cazar a algún turista del que sacar comisiones. Encontre el siguiente bus que me llevaría a la estación de trenes en cuestión de minutos y antes del que el sueño me venciera estaba desayunado un riquísimo muesli con fruta y yoghurt en el "511 Café".Cual fue mi sorpresa cuando el dueño me pregunto.- Tienes piensa de estar cansado?- Si, esque vengo desde Jakarta - Conteste, contandole las innumerables horas que llevaba sin dormir.- Pues tengo una habitación arriba por si quieres descansar - me dijo, y como no ya sospeche. Este me quiere sacar la pasta como la mayoría de la gente que tiene negocios en Asia, pero mi cansancio me podía y...- Cuanto cuesta la habitacion ? - Pregunte para tantear y preparado para el regateo.- Nada, para ti es gratis. Quiero ayudarte - Fue lo que me dijo, y alucine, aquí estaba la primera de las muchas muestras de generosidad que me ofrecería Thailandia en las siguientes horas.Consegui dormir 6h antes de que mi tren dirección Chang Mai saliera. Mi corazón se emociono cuando subí al tren, pues me recordó a los de India, luego descubrí que seria mas parecido de lo que me imaginaba, pues las 12h. que tardaba en llegar se convirtieron en 15h. Aqui en el tren tendía la segunda muestra de generosidad y hospitalidad de los thailandeses, pues las camareras de tren sin necesidad de que les pidiera nada me hacían descuento en todo, todo lo que pidiera, siempre con una sonrrisa.Muy bien, llego a Chang Mai 3 horas mas tarde de lo previsto y jugandomela otra vez me fui a la estación de autobuses a ver si pillaba un bus para Pai. Y como no el ultimo autobús salía en 30 min. y tenia una plaza para mi. Tres horas mas agotado pero sin pensarmelo lo cogí. En este trayecto mi cuerpo ya no podía mas y me dormí en el cálido hombre de la señora que viajaba a mi lado y que no hacia mas que empujarme para que no me teminara tumbando en su regazo.Y por fin Pai, después de mas de 36h. de viaje. Y la tercera muetra de generosidad de este fantástico país del que todavía no e visto nada.Jun es el nombre de esta chica y Hppie Masala su resort, que esta construyendo y que sin pensarselo me ha abierto su casa, sus amigos y mundo. Fue llegar y ofrecerme uno de los bungalós que ya están construidos para que me quede todo el tiempo que quiera, sin necesidad de pagar nada.Pai un pueblo en la frontera de Birmania donde parece que me he quedado atrapado para una temporada larga y desde donde espero poder mandaros una gran noticia en breve.