El día de hoy vengo a ustedes con la reseña del show televisivo titulado Sweet Tooth. ¿Ya lo vieron? Pues quédense a leer esta reseña y al final deciden si es o no lo que les vendría bien ver. Así pues, comencemos con la ficha técnica que en esta entrega es realmente interesante pues el productor de la misma es un hombre conocido en el bajo mundo de los geeks como Iron Man. Ni más ni menos que el señor Robert Downey Jr. y su esposa, Susane Downey en la plataforma de Netflix. A lo largo de las primeras semanas luego del anuncio de la serie en pantalla muchos de nosotros como espectadores nos enteramos de ello. Eso sí, otros más conocían la temática de Sweet tooth porque se trata de una historia basada en un comic del mismo nombre publicado por Vértigo. Esperen en corto la reseña del mismo que ya estoy en proceso de leerlo. Pero bueno, sigamos con la reseña que nos compete hoy. Imaginemos entonces que somos un niño de 10 años llamado Gus. En pantalla se mostrará toda nuestra vida, desde cómo llegamos al lugar donde estamos, algunos de nuestros cumpleaños con nuestro padre y, claro, la vida diaria de un niño normal de 10 años... con cuernos y orejas de ciervo. Porque sí, no somos el infante promedio, sino que hemos nacido con características animales que nos dan ciertas aptitudes extras a las humanas. Pese a eso, todo lo que conocemos es ese pequeño mundo de nuestra cabaña, el sitio donde papá cosecha nuestra comida, los árboles a nuestro alrededor y la vaya metálica que nos ha pedido que no atravesemos. Como diría Vladimir Propp, todas las grandes historias tienen una prohibición que se quebranta. Esta es una de ellas. Y hasta aquí, parece que el mundo es técnicamente perfecto... si tan solo pudiéramos salir lejos y buscar a nuestra madre. Claro que, con todo lo que papá nos ha dicho, tampoco es que tengamos muchas ganas. Allá afuera hay un virus que mata a las personas, un virus que comenzó el mismo día que otros niños comenzaron a nacer también con características de otros muchos animales conocidos en el mundo. Y como dice el narrador: aquí es donde comienza la historia.¿Les parece emocionante hasta aquí? Pues sigamos, entonces. Necesito hablar sobre la puesta en pantalla como tal. Para comenzar, la idea del narrador me parece realmente buena pero me obliga a ver la serie como una cosa aparte del comic. Luego, en la reseña respecto al mismo, les explicaré porqué. Pero justo ahora les diré que, pese a eso, no es un desacierto, sino todo lo contrario. Me ha gustado mucho y le da a la serie una sensación de cuento de hadas que no va mal con la idea original. Eso sí, se nota al completo que los Downeys tienen hijos y que pusieron todo su empeño en mantener la serie en clasificación para todo público. Con esto, repito, no digo que sea algo malo, sólo que quienes esperan ver todo lo que tiene el comic... quizá deban ir a otro sitio. De cualquier manera, creo que es grata la forma en que se diversifican los puntos de vista en la narrativa y van cambiando y jugando con el tiempo. Ese cambio temporal que termina por cuadrar al final de esta primera temporada me ha gustado en serio mucho.
Saludos enormes,