Táchira bajo fuego
TÁCHIRA.Las protestas han ido creciendo, en cantidad y en intensidad. Pueblos como Rubio han estado casi todos los días desde hace 50 días en enfrentamiento con la Guardia Nacional, con grupos de civiles armados, bombas lacrimógenas, tanquetas destruidas y sitios puntuales afectados. San Cristóbal ha estado menos días en combate pero en un escenario más violento, no sólo por la sangre regada en su suelo, sino por los saqueos y la presencia de encapuchados armados, aterrando en urbanizaciones, destruyendo viviendas, vehículos, empresas, etc.
Es difícil para los cuerpos de seguridad diferenciar entre quienes protestan pacíficamente contra el gobierno y entre grupos violentos, algunos en defensa del Gobierno y otros en contra. En sus días de calma la ciudad se mueve con normalidad, la gente va a los restaurantes, al trabajo, a la escuela, al cine. Y con la misma facilidad se repliega durante las protestas. “Hace cuatro días –comenta una periodista- que la ciudad ha estado espantosamente solitaria. Obstáculos en la vía, retirados por cuadrillas de funcionarios policiales y milicianos”. Hay zonas donde un grupo se organiza para trancar y otras los que atracan o causan daños a la propiedad. Tres comandos policiales quemados en Táchira. Varios comercios saquedos. Dos galpones de alimentos saqueados y quemados, al ligarlos equivocadamente con el gobernador Vielma Mora. Otros pueblos se han sumado: Libertad e Independencia en Capacho, municipios Guásimos, Cárdenas, Ayacucho, Sucre, Jáuregui, entre otros. La aplicación de la segunda fase del Plan Zamora o el Plan Guaicaipuro busca controlar lo que hasta ahora no ha sido posible. En Táchira hay una insurrección popular.
FRONTERA.Ocurre en el sector Llano Jorge de San Antonio del Táchira. Hace días que se desarrolla un enfrentamiento a muerte entre guerrilla y paramilitares. Es por el control del contrabando de alimentos, gasolina y medicamentos, así como por las trochas. La mayoría son jóvenes menores de 30 años. Mueren tiroteados y les dejan un cartelito, según sea el caso, justificando a qué grupo pertenece.
INTIMIDACIÓN.Es la que han sufrido los defensores de derechos humanos Yonaide Sanchéz y Nelson Freitez, docentes de la Cátedra de Derechos Humanos de la Universidad Lisandro Alvarado, en Barquisimeto. Así lo denuncia un informe de la ONG inglesa Front Line Defenders. Destacan que el 8May2017, a Yonaide y Nelson les allanan por tercera vez sus casas, y sus pertenencias revueltas por desconocidos, que dejaron una piqueta y dos cuchillos en el comedor. Nelson perteneció al Comité de Víctimas Contra la Impunidad, que trabaja con familiares de víctimas de ejecuciones extrajudiciales por fuerzas policiales y militares durante el gobierno de Luis Reyes Reyes. Front Line Defenders expresa preocupación por los ataques contra Yonaide y Nelsón, así como contra otras organizaciones y defensores de derechos humanos en Venezuela.
GUACO. Así era conocido en Venezuela José Alejandro Muñoz Alcoholado, ex militante del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) y fundador del MIR Ejército Guerrillero de los Pobres (MIR-EGP) en Chile. En Venezuela era comandante de las Fuerzas Bolivarianas de Liberación y/o Fuerzas Patrióticas de Liberación Nacional (FBL-FPLN). Era chileno y conocido en sur América como Chico Alejo. Hace una semana cenaba en un restaurante de la avenida Solano (Caracas) con una persona no identificada. Dos hombres llegaron a cenar y cuando se iban sacaron armas largas y dispararon una ráfaga contra Muñoz Alcoholado, quien murió en el sitio. Guaco tuvo una larga tradición en grupos guerrilleros. Cuando el conflicto de Chiapas, él apareció con el rostro cubierto en una histórica acción donde lo llamaban “comandante”. También perteneció al Ejército de Liberación Nacional (ELN), grupo al cual luego enfrentó cuando llegó a Venezuela. Tuvo activa participación en la formación de las comunas en los llanos venezolanos. Se disponía a radicarse en Uruguay desde junio 2017, luego de haber superado el problema del pasaporte que Chile le había negado. He ahí su foto.
POLICÍA.Fue el 01May17, en la avenida El Parque de la avenida Victoria. Le sucedió a Domenico Albesiano Díaz. Él es un chico de 24 años, estudiante de Derecho de la USM, capitán del equipo de voleibol y funcionario activo del TSJ, adscrito a la Dirección de Investigación de la Magistratura (DEM). Iba a casa de su novia cuando fue atacado por funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana.
En un revelador video se ve a los PNB motorizados cuando intentaron secuestrarlo. Su mamá, la ex juez Superior y ex rectora del estado Miranda, Yolanda Díaz, señala que a Doménico los PNB le causaron fractura de tibia y peroné. El chico logró saltar a un edifico donde le abrieron el portón para evitar el secuestró. La ex juez se pregunta “¿Cómo es posible que los venezolanos tengamos que sufrir ataques de los funcionarios que pagamos con impuestos y el gobierno no nos garantice el derecho a la vida?
AZÚCAR.Fue el 24Marz2017. Juan Antonio Astudillo denuncia ante la Primera Compañía del D-511 del Comando 51 de la Guardia Nacional Bolivariana. Dice que desconocidos trasladan 600 sacos de azúcar, usando sin su consentimiento su número de guía SADA. Tres sargentos se dirigen al comando de El Furrial, Maturín, Monagas. Instalan punto de control y detienen un camión conducido por Wilfe Felipe y a Ricardo José. Transportaban 600 sacos de azúcar de la empresa Comercializadora Miguel Yajure CA que iban para la Panadería La Estrella del Pan Dulce CA. Al comando llegó Marianne Doriana Soto Soto solicitando la entrega de la mercancía. “No la conozco”, dijo Astudillo, pero la mujer asegura que tenían comunicación y que él les prestó la guía SADA, antes para arroz y ahora azúcar. Soto es detenida y le encuentran un sello de Agropecuaria Industrial Los Doce Hijos de Dios. La ponen a disposición de la Fiscalía Tercera. Investigación penal Nr. CZ51-D511-GNB-1ra Cia-050-2016.
- Desde fines del año pasado, al menos 355 waraos han emigrado a Brasil ante la grave situación venezolana, revela un reportaje de Reuters.
- El general Luis Morales Guitian de Valencia, no fue destituido por negarse al Plan Zamora, sino por falta de comando para controlar los saqueos.
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