En un principio cuando vi este libro en Edición Anticipada no me llamó absolutamente nada la atención, pero luego estaba pasando por un mal momento y no me apetecía nada leer y decidí que una lectura sencilla como esta era la mejor opción.
También me llamó la atención por la protagonista y sus problemas con la comida que se nos presentan en la sinopsis. Fiona se refugia en la mala comida para huir del estrés que le produce pensar en separarse de su padre y es que, si los servicios sociales descubren la incapacidad de éste es muy probable que ocurra. Además de este problema, Fiona tiene una gran enemiga: Lylla con la que por desgracia comparte algo: el "amor" por Alberto que empieza a salir con Lylla.
Por suerte, Fiona no está tan sola como puede parecer ya que cuenta con sus mejores amigos Carmen y Max, que la apoyan incondicionalmente y estarán con ella a las duras y a las maduras.
La historia comienza cuando Aurora, la tutora de Fiona trata de averiguar por qué el padre de ésta lleva años sin acudir al colegio y eso puede destapar todos los problemas que sufre la joven después de luchar tanto para mantenerse a flote y permanecer junto a su padre.
Es una novela que me ha sorprendido bastante porque esperaba una novela "sencilla" y aunque lo es, Angela Vallvey se encarga de hacer crítica a través de los personajes tratando problemas cotidianos como: el bullying, los problemas con la comida, la falta de autoestima, las enfermedades o la soledad.
La autora ha sido capaz de crear una historia muy completa con unos personajes muy bien caracterizados sin perder la sencillez y la frescura haciéndola una lectura muy amena. Me arrepiento de no haberla solicitado desde un primer momento (juzgue por su titulo y portada) porque realmente ha sido una sorpresa y me ha gustado mucho.
Valoración: 4/5.
¡Espero que os haya gustado mucho! Nos vemos en la próxima.
¡Sed felices!