Hoy traigo una deliciosa tarta de compota de manzana, granada y nueces caramelizadas con helado. El contraste de la crujiente, dulce y caliente tarta con el frío y cremoso helado es, ¡increíble!
Para esta receta he usado la deliciosa canela de hsol gourmet representaciones que puedes encontrarla en la tienda online aquí. Echarle un vistazo porque tiene muchísimas especias tanto en polvo como enteras a un precio asequible.
La he hecho para el reto ts que este mes era de recetas de libros. Me he vuelto loca pensando pero al final he optado por la tarta de manzana del fantástico libro "Una tarta de manzana llena de esperanza" Bueno esta receta como es típica americana la puedes encontrar en muchos libros y películas.
Este libro es para pensar y reflexionar. Es un chico que guarda un secreto y es que sabe hacer unas tartas de manzana tan deliciosas que son casi mágicas, te hacen ver el mundo con mucha más felicidad. Pero un día este chico mágico desaparece y el pueblo cree que ha desaparecido pero, unos amigos fieles, le buscan hasta conseguir respuestas. Es un libro sencillo y juvenil pero que hace reflexionar a niños y adultos.
Para ver las recetas de todas mis compañeras pincha aquí.
Ingredientes:1 granadazumo de 1 limón3 manzanas4 cucharadas azúcar blancapuñado de nueces caramelizadas2 cucharadas de harina1 cucharada de canela2 masas brisa1 huevo para pintarlohelado al gusto
Elaboración:
En primer lugar tienes que abrir la granada y sacar la carne.
Podéis hacerlo de muchas maneras pero lo mejor es sacarlas suavemente sin aplastarlas porque sino tendrás las manos rojas y luego es difícil quitarte ese tinte. Si ves que te es imposible no aplastarlas usa como mi madre unos guantes y listo.
Luego exprime un limón y resérvalo, será solo para echarlo por la manzana para que no se ponga fea.
Pica las manzanas en trocitos y le echas el zumito de limón. Yo he hecho trozos pequeños para que se haga antes la manzana.
Luego echa el azúcar y remueve bien todo.
Lo siguiente es echar la granada y las nueces caramelizadas.
Echa la harina, esto será para que la compota espese un poquito.
Echa la canela. Yo pongo bastante porque me gusta mucho el sabor pero esto va al gusto. Luego lo he mezclado bien y lo he dejado en un lugar fresco durante una hora para que se mezclen los sabores.
Pasado ese rato coge la masa brisa y la pones sobre un molde previamente bien engrasado. Tienes que estirar antes la masa para que no quede muy gorda y así sea más larga. Lo que queremos es que quede por encima de la compota como se ve en la foto.
Luego pon la parte de arriba. Esta no es necesario que la estires mucho porque es la tapita. Pon el horno a precalentar a 200 grados.
Luego baja lo que sobraba por encima y lo aplastas bien para que no se abra. Haz una cruz o el dibujo que quieras en el centro, esto es para que respire y no estalle.
Báñalo con un poco de huevo todo por encima para que luego quede doradito y echa un poco de azúcar para que quede crujiente.
Mételo al horno a 200º durante 20 minutos. Luego tápalo y déjalo a 170º durante apróximadamente una hora. Yo lo tapé con papel albar.
Tendrás una tarta de compota irresistible. Es muy dulce y sabrosa por dentro y crujiente por fuera.
Yo la he acompañado de helado. Con él harás que la tarta sea menos dulce y el contraste de la tarta calentita (que es como a mi me gusta comer esta tarta) y el frió helado es delicioso. Os recomiendo uno de nata o vainilla para que no enmascare el sabor de la tarta.