Así que me puse manos a la obra a modelar unos cuantos personajes, un par de palmeras, etc... y así quedó la tarta.
Fue muy gracioso cuando la sacaron y Xavi se puso a gritar mientras daba palmas, eso me confirma que le gustó. La tarta era un Red Velvet (pero sin colorante y con chocolate blanco), bañada en almíbar de vainilla y rellena con garnache de chocolate blanco. Cubierta con garnache de chocolate negro. Hice un bizcocho rosa antes y lo corté en círculos, lo puse en la masa para que al cortar la tarta salieran trocitos rosas, y quedó muy vistoso el corte. Os dejo las fotos a ver si os gusta. Muchas felicidades Xavi!!!