Desde hace unos meses procuro que ese toque dulzón sea lo más ligero posible, dentro de lo que cabe. Así, intento eliminar la nata, sustituyo azúcar blanco por azúcar de abedul ( apto para diabéticos )... De esta forma, los que tienen problemas de salud lo agradecen y de camino nos cuidamos todos un poco más.
A toda la familia nos gusta la tarta de queso con cobertura de mermelada casera, realmente es deliciosa, vistosa y muy fácil de hacer. La que hoy os enseño la he hecho dos veces en esta semana, una para celebrar el cumpleaños de mi hija Elisa en casa y otra la llevó para compartirla con sus amigos. En ambas ocasiones ha sido un éxito y yo feliz.
También estáis invitados, si es de vuestro gusto y si os apetece soplar las velitas con nosotros.
INGREDIENTES
Base:
- 1 rulo de galletas María
- 80 g. de mantequilla a temperatura ambiente
- 1 sobre de gelatina en polvo sabor limón
- 400 g. de queso tipo Philadelphia
- 200 g. de leche semidesnatada ( puedes poner leche evaporada, la he hecho de las dos formas y quedan bien con los do tipos de leche )
- 50 g. de azúcar blanca o azúcar de abedul
- 150 g. de mermelada de moras y caquis con chocolate ( puedes utilizar cualquier otro sabor pero ésta aporta un toque especial )
- 2 cucharaditas de gelatina en polvo neutra
- 50 g. de agua
PREPARACIÓN THERMOMIX
Pon las galletas en el vaso y pulveriza programando velocidad 10 durante 5 segundos. Añade la mantequilla y programa 5 segundos, velocidad 5. Echa esta mezcla sobre la base de un molde desmontable, aplasta bien y cubre todo el espacio. Introduce en el congelador mientras haces el relleno de queso.Lava el vaso y agrega la leche programando 3 minutos, 100º, velocidad 1. Añade el queso, gelatina y azúcar y mezcla durante 20 segundos, velocidad 5.Saca el molde del congelador y vierte la mezcla por encima de la base de galletas. Guarda de nuevo en el frigorífico al menos 4 horas, hasta que se solidifique.Echa en el vaso todos los ingredientes de la cobertura, programa tres minutos, 80º, velocidad 2. Espera a que se temple un poco sin que llegue a cuajar y vierte sobre la tarta.
Guarda de nuevo en el frigorífico hasta el momento de servirla. Esta tarta queda mucho mejor si la haces de un día para otro.
PREPARACIÓN TRADICIONAL
Tritura las galletas con las manos o una maza metiéndolas en una bolsa limpia, échalas en un bol y mezcla con la mantequilla. También lo puedes hacer con una picadora. Dispon la mezla de galletas con la mantequilla sobre la base de un molde desmontable. Aplasta bien para que quede una base compacta. Métela en el congelador.Calienta la leche en un cazo, añade el resto de ingredientes en cuanto empiece a hervir, remueve bien con unas varillas para que quede todo bien integrado. Retira del fuego ( de todas formas sigue las instrucciones del fabicante de la gelatina que utileces). Vierte la mezcla sobre la base de galletas. Mete en el frigorífico durante unas 4 horas. Pon todos los ingredientes de la cobertura en un cazo, templa un poco, remueve con las varillas para que quede todo bien mezclado. Espera a que se enfríe sin que llegue a cuajar y echa sobre la tarta. El resto igual.