Calle 31 de Agosto, antes llamada Trinidad, una de las calles más antiguas de Donostia. Hora de empezar a pensar en comer. Vamos de pintxos a "La Viña".
Os ponemos en situación: El local a petar de gente y por fin conseguimos llegar a la barra. Ya tenemos nuestros pintxos. Nos empieza a llamar poderosamente la atención lo que está sucediendo. Vemos como sacan de la cocina un auténtico desfile de tartas. Tartas y más tartas de... queso. En un plis plas llegan a acumularse unas quince tartas de aspecto rústico y glorioso. Evidentemente aquello debe tener éxito entre la clientela. Acabados nuestros pintxos nos miramos y tenemos claro que hay que probarlas, pedimos un par de raciones para compartir... Alucinamos, con razón hornean tartas a cascoporro. Que delicia! Que cremosidad! Que pedazo tarta!
De allí no nos íbamos sin conseguir la receta de semejante tarta (que casi crea adicción), eso no era opción. Pero como no podemos ir a Donostia tantas veces como quisiéramos, hablamos con Mikel, el camarero que nos atendió, quien muy amablemente nos explicó como elaborarla. A cambio, le prometimos que la publicaríamos y lo prometido es deuda.
Por cierto, ya la hemos hecho unas cuantas veces y queda instalada como miembro permanente de las recetas habituales. Tiene una particularidad: no hay dos iguales! Tienen mucha personalidad.
Ingredientes (para 10 ó 12 personas)
- 1 kg. de queso Philadelphia o San Millán
- 1 litro de nata líquida 35% de materia grasa (importante)
- 7 huevos
- 400 gr. de azúcar
- 1 cucharada sopera de harina
- papel de horno
- molde desmontable de 26 cm
- margarina para engrasar el molde
Engrasáis el molde, colocáis el papel de horno encima.
Precalentad el horno a 180º.
En un bol grande ponéis todos los ingredientes y los batís. Volcáis la mezcla en el molde.
Lo metéis en el horno entre 50 y 60 minutos. Cuando la saquéis os dará la sensación de que por el centro baila un poco, es normal, al enfriar coge más consistencia.
Desmoldadla cuando esté completamente fría.
Aquí tenéis el claro ejemplo de que no salen dos tartas iguales (ésta quedó mas tostadita).
Para terminar, un saludo a Mikel!