Normalmente cuando hacemos una tarta para una despedida de soltera siempre nos piden algo erótico, pero en este caso no ha sido así. Se casaba una chica que es profesora y sus amigas han preferido una tarta con esa temática.
El bizcocho era un Red Velvet calado con un almíbar de vainilla y ron, relleno de una buttercream de chocolate blanco. Este bizcocho lo usamos mucho en las tartas porque nos encanta como queda tanto de textura como la jugosidad que tiene.
Espero que os guste la tarta.