Una refrescante, ligera y deliciosa tarta perfecta para tomar como postre en estos días festivos.
Ingredientes:
Base:
Un bizcocho genovés a la medida del molde
Mousse:
1 tarro de mermelada de mango Eco-Chirimoya
200 c.c. de nata para montar
40 grs. de azúcar vainillada
200 grs. de queso crema tipo Philadelphia
130 c.c. de leche
1 sobrecito de gelatina neutra
Para decorar:
1 mango en rodajas
Hierbabuena
Instrucciones:
Preparamos un molde desmontable y lo forramos con papel de horno, base y laterales. Para que quede bien adherido enmantequillamos ligeramente.
Ponemos el bizcocho en la base, lo pinchamos con un tenedor.
Mezclamos 2 cucharadas de mermelada con dos de agua, la calentamos y disolvemos bien.
Con esta mezcla emborrachamos ligeramente el bizcocho, reservamos.
Montamos la nata con el azúcar vainillado, reservamos en el frigo.
Batimos el queso con el resto de la mermelada hasta conseguir una crema sin grumos, reservamos.
Preparamos la gelatina con la leche siguiendo las intrucciones del paquete, debe quedar bien disuelta.
Añadimos la gelatina preparada a la mezcla de queso y mermelada. Yo lo he hecho con un colador para asegurarme que no quedaban grumos de gelatina sin disolver que estropearían la receta. Si queda alguno lo ponemos en un bol, le añadiremos una cucharada de agua, calentamos en el microondas hasta deshacerlo completamente y terminamos de unir a la preparación, mezclamos muy bien.
Por último le añadiremos la nata montada, poco a poco y con movimientos envolventes.
Vertemos la mezcla sobre la base de bizcocho, damos unos golpecitos al molde para que se acomode la crema y no queden huecos y aplanamos la superficie.
Dejamos en el frigo hasta el día siguiente.
Decoramos con rodajitas de mango y unas hojitas de hierbabuena.
Buenísima!