Adoro la mousse, adoro el chocolate negro y adoro todo lo que me haga recordar momentos de mi infancia... como esas tardes en casa de mi abuela, tomando un buen bocadillo de pan tostado con chocolate. Existe algo más sencillo pero rico a la vez? Sencillo lo dudo, pero rico, os aseguro que sí. Y para muestra un botón... así nace mi Tarta Mousse de pan con chocolate!
Ésta ha sido la elaboración perfecta para estrenar de manera oficial mi libro "Pasión por el chocolate" del grandísimo David Pallàs. La verdad es que ya he ido probando diferentes técnicas, combinaciones y presentaciones que aparecen en este libro, pero aún no os había enseñado una elaboración 100% sacada de sus valiosas páginas.
Una receta con muchos pasos de elaboración pero con un resultado, estético y gustativo, perfecto. Una mousse suave y con ese toque justo a pan con chocolate; una base de galleta (incorporada por mí.. no aparece en el libro) que le aporta ese matiz crujiente que sabéis que tanto me gusta encontrar en las recetas dulces; y un glaseado brillante que no sólo maravilla al verlo sino que además está como para comerlo a cucharadas día sí, día también (yo debo confesar que no me ha quedado tan liso como me hubiera gustado... y se nota bastante... pero para ser la primera vez y dado que la tarta está taaaaaaaaaaaaan buena, no podía dejar escapar la oportunidad de compartirla con todos vosotros! Seguro que la próxima vez consigo un glaseado muchísimo mejor!).
INGREDIENTES para la base crujiente:
- 145g galletas digestive con chocolate negro
- 70g mantequilla
PREPARACIÓN de la base crujiente:
- Picamos por completo las galletas digestive.
- Con la ayuda de un microondas, deshacemos la mantequilla.
- Echamos la mantequilla sobre el polvo de galleta y mezclamos para que se integren bien los dos ingredientes.
- En un molde redondo, repartimos la mezcla y aplastamos con la ayuda del culo de un vaso o el revés de una cuchara. Debemos conseguir que quede lo más liso y homogéneo posible.
- Dejamos enfriar y endurecer en la nevera, mientras preparamos las siguientes elaboraciones.
*Tened en cuenta que la base crujiente será lo último que añadiremos a la tarta, así que el montaje de ésta junto a la tarta os lo explicaré al final del todo.
INGREDIENTES para la mousse:
- 50g pan de barra tostado o tostadas
- 40g azúcar moreno
- 300ml nata líquida para montar
- 15ml agua
- 2 yemas de huevo
- 70g azúcar
- 4 hojas de gelatina neutra
- 25ml leche
- 40g chips de chocolate negro (yo he troceado unas onzas de chocolate negro Torras)
PREPARACIÓN de la mousse:
- En una sartén a fuego medio, colocamos el azúcar moreno con las tostas de pan. Vamos mezclando con una espátula de madera a medida que el azúcar se va caramelizando, con el objetivo de que el pan quede bien impregnado del caramelo. Conseguiremos un pan tostado, dulce y muy crujiente. Reservamos y cuando esté frío lo troceamos.
- Directamente de la nevera, montamos la nata hasta conseguir picos definidos. Reservamos en la nevera hasta su uso.
- Ponemos las hojas de gelatina en un bol con agua muy fría. Las dejamos hidratar durante unos 15 minutos, mientras procedemos a la elaboración del siguiente paso.
- En un cazo, colocamos el agua con el azúcar blanco. Lo llevamos a ebullición y en ese momento lo retiramos del fuego. Le añadimos las yemas de huevo y, de seguida, batimos enérgicamente para que las yemas no se cuajen con el calor. Conseguiremos una mezcla espumosa y con mucho cuerpo (biscuit glasé).
- Calentamos la leche en el microondas. Sacamos las hojas de gelatina ya hidratadas y las vertemos sobre la leche. Mezclamos para que se disuelvan y lo incorporamos a nuestro biscuit glasé.
- Incorporamos la nata previamente montada, realizando movimientos envolventes con una espátula de mano.
- Finalmente, añadimos el pan caramelizado y los chips de chocolate. Repartimos por la masa, realizando movimientos envolventes y muy suaves para que la textura conseguida con la nata montada no se baje.
- Vertemos la mezcla dentro de nuestro molde. Lo metemos en el congelador y dejamos cuajar por completo, un mínimo de 4 horas. Os recomiendo dejarlo toda la noche, así no tenéis que estar pendientes de ir comprobándolo.
INGREDIENTES del glaseado: *A mi me salió muchísima cantidad de glaseado pero lo congelé y estaba perfecto para utilizar en otras elaboraciones. Yo os recomendaría hacer la mitad, pero os dejo las cantidades exactas que David Pallás indica en el libro.
- 100ml agua
- 600g azúcar
- 400ml nata líquida para montar
- 200g cacao en polvo (yo he usado Torras)
- 9 hojas de gelatina neutra
- 110ml agua muy fría
PREPARACIÓN del glaseado:
- Ponemos las hojas de gelatina en un bol con agua muy fría. Dejamos que se hidraten durante unos 15 minutos, mientras vamos realizando los siguientes pasos.
- En un cazo, calentamos los 100ml de agua, la nata líquida y el azúcar. Necesitamos que la preparación llegue a los 80º, por ello es necesario disponer de un termómetro de cocina.
- Cuando alcance dicha temperatura lo retiramos del fuego y añadimos el cacao en polvo. Removemos para que se integre con los otros ingredientes.
- Incorporamos las hojas de gelatina y continuamos mezclando para que se deshagan por completo. Colamos la mezcla con un colador de malla fina o bien pasamos el túrmix (así conseguiremos eliminar los posibles grumos de cacao que puedan quedar, y conseguiremos un glaseado totalmente uniforme).
- Por último, añadimos los 110ml de agua muy fría (yo la puse en el congelador un rato antes de utilizarla y estaba perfecta) y mezclamos.
- Tapamos con papel de film y dejamos reposar nuestro glaseado durante 24 horas.
MONTAJE de la tarta:
- Desmoldamos nuestra mousse y la colocamos sobre una rejilla para poder glasearla. Debéis ir con mucho cuidado para que nos se nos rompa la base de ésta. Un buen truco es colocar una lámina de cartón de un tamaño inferior al diámetro de nuestra tarta. Así la base será más resistente a la hora de ponerla encima de la rejilla y además podremos glasear bien todo el contorno de ésta.
- Calentamos ligeramente el glaseado en el fuego o bien al baño María. Únicamente hasta que vuelva a estar totalmente líquido. No lo calentéis demasiado o el calor de éste puede estropear nuestra mousse congelada!
- Glaseamos la tarta, asegurándonos de que todos los rincones quedan bien cubiertos por el chocolate. Si es necesario podéis dar dos capas de glaseado.
- Dejamos cuajar ligeramente en la nevera.
- Ahora llega el momento más delicado. Vamos a pasar nuestra mousse a la capa crujiente de galleta! Para ello, separamos la mousse glaseada de la base de cartón que hemos colocado antes, ayudándonos de una espátula fina y realizando movimientos muy suaves. Levantamos la mousse y la colocamos en el centro de nuestra base crujiente. Intentad no tocar en ningún momento el glaseado o vuestra huella quedará marcada para siempre.
- De manera opcional podéis decorar la tarta con pipas, semillas de sésamo caramelizado, fideos de chocolate y pan caramelizado.
Yo, por el momento, me retiro para deleitarme con una buena porción de semejante recetón. Y vosotros, os vais a animar a probarla? Estoy segura de que os va a encantar! Es totalmente irresistible.
Besooootes <3