Que pastoreño soy porque lo siento,
de llorar en tu presencia no me avergüenzo.
Que herencia más bonita, a mí me han “dejao”,
a quererte, Pastora, me han “enseñao”.Y aunque pasen los años, nunca, Señora,
dejaré de adorarte como hago ahora.
Este cariño grande que vi en mis padres,
en mi verán mis hijos cuando de ti hable.
Te quiero,
porque eres la más bonita,
eres Reina y eres sencilla,
eres la más bendita de las mujeres,
esperanza y orgullo del que te quiere.
Y esta canción que suena con alegría,
va repitiendo al aire tú eres mi vida,
Te canto a ti, Pastora, porque te quiero.
y tú sabes cómo quiere un pastoreño.
Te quiero,
porque eres la más bonita,
eres Reina y eres sencilla,
eres la más bendita de las mujeres,
esperanza y orgullo del que te quiere.
Antonio Portillo Daza
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