Te va a ocurrir una de estas dos cosas

Por Falcaide @falcaide

Con toda proba-bilidad te va a ocurrir una de estas dos cosas:
– Tu propia empresa va a tener que cerrar.– Te van a despedir de la empresa en que trabajas.
Puede sonar fuerte escucharla, pero negar la realidad es uno de los mayores errores que podemos cometer (ver post Las dos mayores especialidades del ser humano). 
Hoy día todo tiene una fecha de caducidad más corta. Se puede decir que, frente a épocas pretéritas cuando uno montaba un negocio, en principio con carácter indefinido, hoy día se sabe que casi con toda seguridad tiene un carácter definido.
Ese carácter efímero, y la necesaria agilidad para adaptarse a la velocidad del cambio, hacen también que las organizaciones estén obligadas a ser muy atléticas, muy fibrosas, sin un gramo de grasa, porque los costes fijos son habitualmente la gran lacra de las empresas. Por eso cada vez habrá más freelance ofreciendo sus servicios profesionales de manera independiente. Cada vez las empresas serán más ligeras en sus costes de estructura. 
Hay un concepto que cada día irá cobrando mayor protagonismo en el entorno empresarial y mercantil, lo que podríamos denominar BLV, o lo que es lo mismo: Búscate La Vida. Y en este entorno, hay varias cosas que adquieren más importancia:
1. CAPACIDAD PARA RELACIONARSE.
El networking será cada vez más importante, y más aún en países donde las relaciones personales tienen mayor importancia. Pero networking no es establecer relaciones sino mantener relaciones. Y mantener relaciones exige tiempo y esfuerzo. Además, networking no es sólo ir a eventos, sino sobre todo, aportar valor. Merece la pena leer, entre otros, el libro El poder de las relaciones, de John C. Maxwell.
2. CAPACIDAD PARA VENDER.
Está muy bien relacionarse, pero al final hay que cerrar. La venta es la venta. Una cosa es ser un buen relaciones públicas y otra un buen comercial. Quien no vende, no come. Todas las empresas (Zara, Repsol, Telefónica, Telecinco...) viven de lo mismo: de vender. Es la pata más estratégica de la empresa y donde más energía hay que meter. Si los números salen, el resto también sale relativamente bien.
3. CAPACIDAD PARA TENER VISIBILIDAD. 
Lo que no se conoce, no existe. En una reciente Entrevista con EdenRed, ya comentaba: «Si hay un rasgo que define prácticamente a cualquier mercado es el de la infoxicación, es decir, la intoxicación por exceso de información y alternativas. Eso implica que cada día es más complicado que los consumidores te presten atención, y luego te tengan en la cabeza y te recuerden. Si eres muy bueno, pero no tienes visibilidad y pasas desapercibido, el mercado no contará contigo». Hay que ganarse la atención y aparecer allí donde están los principales prescriptores y medios del mercado. Armar ruido es una necesidad.
4. CAPACIDAD PARA DIFERENCIARSE. 
Es muy importante buscar nichos de mercado. No vendas coaching, vende coaching para artistas, para deportistas, para financieros, para jóvenes... No vendas periodismo, vende periodismo muy especializado. Cuanto más especialización, mejor. Te permite posicionarte de manera mucho más concreta. Eso es algo fundamental desde el punto de vista de la Marca Personal. De ello ya hablamos en Dedícate a ser el mejor siendo diferente. 
5. CAPACIDAD PARA FORMARSE
La consigna es clara: Sé tan bueno que los demás no puedan ignorarte. Hay que invertir en leer, estudiar, ver ponencias y vídeos. En aprender. Hay que ser un eterno estudiante. La cultura ayuda a vender, a sentirse seguro, a generar credibilidad en las conversaciones... De ello ya hablamos en el post Tan sólo una hora al día. El mundo es más competitivo y estar más formado permite tener más recursos para hacer frente a los desafíos y ser opción preferente.
6. CAPACIDAD PARA REINVENTARSE
Mucha gente tendrá que empezar de cero. Y ello obliga a poner el foco, no en la profesión (como hacen muchos) sino en las habilidades (como hacen pocos). Lo dijimos hace tiempo en el post 7 reflexiones sobre la gestión del talento: «Lo importante es lo que sabes hacer, no la profesión que realizas. Lo importante no es si eres el recepcionista de un Hotel, sino tus habilidades como recepcionista: amabilidad, gestión de incovenientes, gusto por la gente... que son muy aprovechables en otros ámbitos y sectores. Si te identificas con tus habilidades, en lugar de con tu profesión, te será más fácil cambiar de trabajo o que te contraten si buscas empleo. Hay mucha gente que no es consciente de todo el potencial que tiene».
7. CAPACIDAD PARA INNOVAR
En mercados muy saturados, de exceso de oferta en casi todo, el consumidor se cansa rápido de todo y pide novedad. Dar lo mismo una y otra vez no tiene, en principio, mucho recorrido. Hay que renovarse con una cierta constancia. Altamente recomendable es leer El Efecto Medici. Tienes que provocar moverte en entornos diversos, porque la innovación siempre procede de la diversidad: diversidad de edades, profesiones, culturas... diversidad de todo. Del roce y choque de aspectos diversos nacen las nuevas ideas (ver post Si Leonardo Da Vinci levantase la cabeza).
Vamos a un entorno mucho más incierto y competitivo, donde habrá mucha más lucha, un entorno mucho más darwinista diría yo. Vamos a un mercado mucho más polarizado, menos clase media, más ganadores y perdedores. Aunque estar en uno u otra lado casi nunca será permanente sino temporal. Así lo veo yo. La cuestión no es baladí, porque como apunta Seth Godin: «Los ganadores ganan a lo grande porque a la gente le encanta los ganadores».
* Hoy os dejo mi artículo-colaboración para Emprenderalia (@emprenderalia) con el título Después del sí, quiero.
* Hoy en Libros de Management (@librosdemanagem) una Entrevista a Jesús A. Lacoste, hablando de su libro El perfil profesional y personal de los emprendedores digitales (73 entrevistas).                                                                                                                                                  Conoce mi nuevo libro «FAST GOOD MANAGEMENT» |http://www.fastgoodmanagement.com|