Apuesto a que la pregunta del titular se te antoja extraĂąa y piensas que debo haberme vuelto loca. ÂżCĂłmo que si prefiero el diseĂąo o la funcionalidad en tecnologĂas? ÂżAcaso hay que elegir una opciĂłn?! Afortunadamente, ya que la respuesta es obvia, no tenemos que elegir, y disfrutamos de ambas caracterĂsticas que nos hacen la vida no sĂłlo mĂĄs fĂĄcil, sino también, mĂĄs atractiva. Por supuesto, un dispositivo tiene que resultar Ăştil y funcional, pero Âżnos da igual el aspecto que tenga o nos gusta tener para elegir?
Ha nacido una tendencia en torno a la tecnologĂa que es el “wearable technologies”, o tecnologĂa vestible. Quienes han bautizado esta moda, la entienden como una tendencia donde prima todo cuanto rodea al dispositivo casi tanto mĂĄs que el dispositivo mismo. Y es que, dado que toda tecnologĂa que portamos es visible a terceros, no por ir acompaĂąados de lo Ăşltimo, estamos dispuestos a lucir feos. Un ejemplo clĂĄsico es el reloj. Sirve para marcarnos las horas, y sin embargo, hay colores, diseĂąos, tamaĂąos y modelos de lo mĂĄs variopinto y sofisticado para elegir.
La belleza no sĂłlo estĂĄ en el interior
MĂĄs que un dicho, la belleza no cuenta Ăşnicamente la que poseemos en el interior, y es que si bien esto cuela en los cuentos morales, hasta en los cuentos de hadas la belleza se exhibe externamente. El exterior prima mĂĄs de lo que muchos somos conscientes, y de ello se nutren las ferias y diseĂąadores, para presentar lo Ăşltimo en cuanto a gadgets, aplicaciones y otros aĂąadidos tecnolĂłgicos.
La vestimenta se extrapola también al universo de la tecnologĂa. AsĂ que, vaya usted preparĂĄndose para ir a la Ăşltima, porque ya no serĂĄn exclusivamente sus hijos, su pareja o sus mascotas quienes le exijan gozar de una buena presencia. Ahora también la tecnologĂa, tan arraigada en nuestras vidas y tan asentada en nuestro dĂa a dĂa, viene dispuesta a revolucionar nuestras costumbres. Por segunda vez. O tercera. O, ÂżCuĂĄntas van ya? La revoluciĂłn tecnolĂłgica no tiene fin.
Componentes de pc, tablets, relojes, pulsĂłmetros, celulares y una lista que no finalizarĂamos en diez aĂąos, ahora de miniaturizan, se modernizan, se caracterizan y adquieren vida propia. Dotan de personalidad al dispositivo, revela nuestra naturaleza, y al tiempo, vacĂa nuestros bolsillos.
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