Telebasura: Los Protegidos

Publicado el 15 septiembre 2015 por Elaltramuz @ElAltramuz

Normalmente en esta sección no me gusta hablar de series televisivas, ya que el blanco de todo nuestro odio suele ir más dirigido a los programas que nos desvinculan de la razón y la inteligencia, si es que alguna vez la hemos tenido, que tampoco estamos muy seguros. Pero en esta ocasión, al igual que en alguna otra, nos hemos salido un poco del margen para acabar hablando de uno de los productos más mediocres que ha dado Antena 3 en los últimos años. A continuación os narraré la experiencia que he sufrido al ver esta basura.
Era una mañana normal, como cualquier otra. Yo estaba disfrutando de unas placenteras vacaciones, y sin salir de la rutina, me dispuse a realizar mis tareas caseras habituales. Poco después el sofá me tentó, y en un acto de vaguería muy común en mí, me senté en él y encendí la televisión.
Debo decir en mi defensa, que no acostumbro a utilizar la televisión para ver ninguno de los canales que ofrece, y más bien está limitada a contenido de entretenimiento audiovisual externo. Bien, continuemos...
Recuerdo que una amiga me había hablado muy bien de la serie responsable de que hoy esté escribiendo esto. Casualmente en aquel momento comenzaba un capítulo de Los Protegidos, y me dije: "¿por qué no?". Sentía curiosidad. En qué hora.
En realidad nunca entendí qué camino pretendía seguir aquella serie. Lo que pude deducir es que era una familia que tenían unos hijos con superpoderes, y que unos extraños personajes querían secuestrarlos. Antonio Garrido (ahora os hablaré de este personaje) era el padre de uno de ellos, mientras que el resto parece ser adoptados. Angie Cepeda se hace pasar por su mujer, y juntos forman aquel clan de freaks. Tampoco puede faltar la chica guapa y el macarra de turno, los cuales por supuesto y como no podía ser de otra forma acaban enamorados. Pero bueno, vamos por partes.
Antonio Garrido vuelve a la televisión en calidad de actor. La verdad es que no entiendo a quien se le ocurre. Creo que alguien lo ha catalogado como una especie de Playboy, un Arturo Fernández de nuevo siglo, y que parece querer comerse la pantalla en cada una de sus lamentables actuaciones. Cosa curiosa, teniendo en cuenta de que por lo que más se recuerda a este tipo es por el hostión que se metió durante la emisión de aquel cutre programa que presentaba en TVE llamado "Identity". Pero vamos, que si no os acordáis ya estoy aquí para refrescaros la memoria. A decir verdad, no tiene desperdicio alguno.

Pero al margen de esto, también nos ha dejado joyas en el cine, o qué pensábais. Se me viene a la mente una escena en aquella decepcionante película llamada Diario de una Ninfómana, en la cual aparecía, creo que haciendo de italiano, con un acento muy propopio de la Toscana de Móstoles. Todo muy extraño. Pero en el fondo me parece un buen tipo, sólo que tampoco entiendo esas pintas que le ponen en la serie de la que hablamos. Hay gente que tiene mala suerte, y el pobre Antonio la tiene. Pero disfrutad una vez más del video, por favor.
Quiero centrarme ahora en lo que os decía del romance adolescente. Como ya sabéis de sobra, en España nos encantan las historias de amor entre hermanos que no lo son, o que sí lo son pero igualmente se enamoran, y todo ese tipo de perturbadoras situaciones. En este caso, ambos pertenecen originariamente de familias diferentes. Se empiezan odiando y luego se quieren, (yo no entiendo como con lo originales que somos la HBO no ha comprado los derechos de Los Protegidos).

Niños y el macarra.


El tío es un chulo de mierda, y ella la modosita del insti. Por supuesto interpretando papeles de muchachos de 16 o 17 años, aunque los actores rocen la treintena, y la verdad es que eso también me genera una sensación extraña en el estómago. La interpretación de Lucho Fernández, que es como le gusta que le llamen, realiza la función de poner voz de macarra, fumar y todas esas cosas que hacen los chicos malos. También tiene un tatuaje en su pectoral esculpido a fuego en el gimnasio del barrio. Todo esto acompañado con el lío que tiene con la vecina; la tía buena rubia y pija a la que hay que detestar porque le está quitando el chorbo a la hermana, que es buena y usa guantes para no freir a la gente con sus poderes eléctricos. Algo así como Pícara de X-Men. Como digo, todo muy original.
Los efectos especiales, ya que entramos en materia, son de lo más impresionante que he visto hacer con el Trial Version de After Effects, ya que en ocasiones parece que están apurando al máximo la versión de prueba de 60 días. Eso, ligado a las interpretaciones pésimas del reparto, en especial los niños pequeños, que no sé de dónde los han sacado tampoco, hace pensar que estamos viendo Los Chicos del Maíz IV o algo peor.
De los niños prefiero ni hablar más de lo anteriormente mencionado, ya que sólo conseguiría cabrearme. Los niños, son niños, no hace falta que guionistas pésimos los caractericen como auténticos idiotas. Aunque es cierto que las generaciones venideras den la sesación de la involución que parece estar sufriendo el ser humano. No es su culpa, es la de Mediaset y Atresmedia, entre otras.
El problema que tiene Los Protegidos, no es sólo uno, tiene muchos: desde personajes lamentables y odiosos, argumento absurdo, cutrez presente de principio a fin, diálogos terribles, y mucho más es el caldo de cultivo de esta mierda.Propiedad de ElAltramuz.com