¿Qué cambios se están produciendo actualmente en la economía global? El pasado mes de mayo McKinsey Quarterly público el informe “Five forces reshaping the global economy” en el que se mostraban algunas de las fuerzas que están reconfigurando la economía mundial. La tendencia más evidente es un desplazamiento de la actividad económica hacia los países emergentes, países con una población joven y creciente que en el futuro se constuirán como centros de consumo y producción y que serán grandes proveedores de capital, talento e innovación.
Por el contrario, la demografía en los países desarrollados muestra un panorama de baja natalidad y envejecimiento de la población. Su crecimiento económico sólo será posible si experimentan un crecimiento de la productividad. Para que las empresas puedan conseguir sus metas estratégicas deberán disponer de personas con talento, un factor que empieza a escasear en funciones como el management, la estrategia o la investigación y el desarrollo. Así, uno de los desafíos más importantes en el futuro será el de la búsqueda y fidelización del talento. Por ello veremos cómo las empresas acudirán a los países emergentes en busca de talento para importarlo a sus centros de producción, o se deslocalizarán hacia países donde puedan disponer del talento que necesitan.
La tendencia que muestra la economía global hacia un mercado libre de bienes, información y capital sigue manteniéndose a pesar de la recesión actual. En este sentido es interesante destacar cómo el acceso ilimitado a la información beneficia cada vez más a los consumidores. La mayor trasparencia de los precios, o la capacidad que tienen en la actualidad de conectarse mediante redes sociales está produciendo en la actualidad cambios disruptivos en el comportamiento del consumidor. Ante este panorama las compañías no pueden hacer más que invertir en innovación para orientar más sus negocios hacia el consumidor y hacia una mayor customización de sus productos y de sus servicios.
Respecto a los recursos naturales, tanto las empresas, como las personas, como las administraciones públicas nos habituaremos a una situación en la que existen restricciones para acceder a determinados recursos naturales, lo que producirá cambios en nuestras estrategias y decisiones de consumo.
Finalmente, también se están produciendo cambios en el sector público, en la medida que muchos gobiernos se encuentran en unos niveles de gasto y deuda que pueden afectar a sus respectivos niveles de PIB. Esta situación está creando la necesidad de innovar en nuevos modelos de gestión pública, modelos basados en la cooperación con empresas, ciudadanos, instituciones o ONG´s. Así veremos nuevas iniciativas de cooperación multilateral en asuntos como el cambio climático, la crisis financiera, el comercio, la proliferación nuclear o el terrorismo.
La economía global no es un ente estático sino dinámico. Se encuentra sometida a fuerzas que continuamente la están transformando, algunas de ellas son enormente disruptivas. Conocerlas puede sernos de gran ayuda a la hora de tomar decisiones.
Notas
“Five forces reshaping the global economy” está publicado por Renée Dye y Elizabeth Stephenson en McKinsey Quarterly. Puede descargarse en la siguiente dirección