No tendrá más dinero hasta que aprenda a gestionar lo que ya tiene. Puede ser duro aceptarlo pero es cierto.
Muchos dicen: “Si tuviera algo más de dinero me iría mucho mejor. Ya no
tendría problemas económicos. Mi jefe es un tacaño y una mala persona. Me paga
muy poco. Además, debo pagar muchos impuestos, mi hijo cada vez gasta más, mi
pareja cada vez gasta más y no hay forma de llegar a fin de mes.”
Desean con todas sus fuerzas tener más dinero para poder salir de los
apuros económicos y aunque consigan unos ingresos extra nada ocurre. Siguen
teniendo problemas para llegar a fin de mes.
¿Es usted de los que llegan justos a fin de mes? ¿Es usted de los que no
pueden ahorrar? No conozco sus circunstancias pero lo que si se es que la
mayoría de los que obtienen ingresos con regularidad y afirman no poder
ahorrar, no están en lo cierto. Tendemos a ajustar los gastos a los ingresos y
a considerar necesarios gastos que en realidad no lo son tanto. Para una
persona que gana cien mil euros al año alquilar una casa de tres mil metros cuadrados
para pasar las vacaciones le puede parecer un gasto necesario. Para alguien que
gana cincuenta mil euros al año viajar cada cierto tiempo a Milán para adquirir
lo último en ropa le puede parecer necesario, para alguien que gana quince mil
euros al año desayunar y comer en el bar a diario lo puede ver como un capricho
necesario y merecido por el gran esfuerzo diario en el trabajo. No voy a
discutir lo que es necesario y lo que no aunque se puede observar que estos
gastos llamados necesarios tienden a incrementarse y multiplicarse junto con un
incremento de los ingresos. Parece ser que los gastos se ajustan a los
ingresos. Finalmente, poco importa si
ganas mil o si ganas cien mil al año porque llegaras a fin de mes a cero
igualmente. Seguro que aquel que gana cien mil vive mejor que el que gana mil
aunque ante la perdida de la única fuente de ingresos, ambos estarán en la
misma situación: sin ingresos, sin ahorros y con muchos gastos a los que hacer
frente. Ambos están a uno o dos meses de la ruina.
Si quiere tener más dinero lo que necesita hacer es gestionar mejor el dinero
que ya tiene. ¿Piensa que sus problemas económicos se solucionaran con doblar
los ingresos? ¿Qué me dicen si hablo de triplicar los ingresos actuales? ¿Cree
que le iría mejor? Es probable. Aunque, estoy seguro de que será por poco tiempo
pues lo que hará después de incrementar los ingresos será aumentar los gastos
poco a poco y puede que incluso sin darse cuenta llegará un momento en el que
gastará más de lo que ingresa. ¿Por qué ocurre esto? Al aumentar los ingresos
aumentan también las necesidades. Aumentan los gastos “obligatorios”.
El Universo es sabio. El dinero lo ha de tener el que mejor uso haga de él.
¿Por qué ha de ganar más si dentro de seis meses estará en la misma situación de
ahora aunque se incrementen sus ingresos?
Para que el Universo te de más dinero debes demostrar que sabes gestionar
lo que ya tienes. Es así de fácil. ¿Por qué iba a darte más si no sabes
gestionar lo que ya tienes? Solo tendrás más cuando estés preparado para tener
más. Cuando demuestres que sabes gestionar cantidades pequeñas podrás tener
acceso a cantidades mayores.
No eche la culpa a nadie por no tener suficiente dinero o tanto dinero como
le gustaría. En realidad son sus hábitos lo que no le permite pasar a otro
nivel, lo que no le permite ahorrar, conseguir hacer frente a todas las obligaciones
a su debido tiempo o a obtener ingresos de otras fuentes que no sean el empleo.
Son sus creencias las que no le permiten avanzar. La creencia de que el dinero
solo lo puedes ganar trabajando ocho horas al día en una fabrica, en una
oficina o en una tienda.
A mí me han enseñado de pequeño que es importante pagarse a uno mismo antes
que a nadie. Me han enseñado que si dependes de una única fuente de ingresos lo
puedes pasar muy mal en caso de perderla. Desde hace años, siempre que ingreso
dinero de cualquier fuente, me pago a mí mismo entre un 10 y un 30 %. Ese
dinero va a mi cartera de inversión y es invertido para ganar más dinero. Todas las ganancias se reinvierten. Sé que de
esta forma con el tiempo puedo llegar a gestionar una suma muy considerable de
dinero. Sé que en algún momento los ingresos alternativos al salario (los
ingresos de mis inversiones) llegarán a superar los ingresos laborales. También
dedico un pequeño porcentaje, normalmente, un 5 % de los ingresos, para un
fondo de emergencias. Este dinero invertido en productos con liquidez total del
que puedo disponer en unas pocas horas, de modo que dispongo de dinero para
hacer frente a imprevistos sin necesitar endeudarme y además ese dinero
mientras no se utiliza está generando unos pequeños beneficios que se añaden al
fondo.
Otro 10 % de los ingresos se utiliza para hacer pagos anticipados a un
préstamo contraído para la adquisición de dos propiedades inmobiliarias. Es una
inversión a largo plazo y una fuente de ingresos segura para muchos años.
Una vez haya pagado todo lo anteriormente dicho, el dinero restante se
utiliza para los gastos corrientes. Hay meses que me puede permitir viajar por
ejemplo y hay otros que no. Simplemente ajusto los gastos al dinero restante
después de haber cumplido con todas las obligaciones. Me pago regularmente y
puedo decir que estoy más satisfecho gestionando mi cartera de inversión en vez
de utilizar ese dinero para cualquier otra cosa. Además, con el tiempo, los
beneficios obtenidos de los ahorros pueden llegar a superar los gastos
habituales. Ese día puedes dedicarte exclusivamente a tus inversiones y dejar
de trabajar para terceros.
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Libros escritos por Gabriel Arba: