Tzvetan Todorov, crítico y teórico literario francés nos dice en su Introducción a la literatura fantástica:
Viejas como el miedo, las ficciones fantásticas son anteriores a las letras..... Con Kafka estamos por lo tanto enfrentados a lo fantástico generalizado: el mundo entero del libro y el lector mismo están incluidos en él. Veamos un ejemplo especialmente claro de este nuevo fantástico, que Sartre improvisa para ilustrar su idea: "Me siento, pido un café con crema, el mozo me hace repetir tres veces el pedido y lo repite él mismo para evitar todo riesgo de error. Se va, transmite mi pedido a un segundo mozo, que lo anota en una libreta y lo transmite a un tercero. Al fin vuelve un cuarto y dice: "Aquí está", mientras deja un tintero sobre la mesa. "Pero yo había pedido un café con crema", digo yo. "Y bien, aquí está", dice él yéndose. Si el lector puede pensar, al leer cuentos de este tipo, que se trata de una broma de los mozos o de alguna psicosis colectiva (lo que Maupassant quería hacernos creer en El horla, por ejemplo,), hemos perdido la partida. Pero si hemos sabido darle la impresión de un mundo donde estas manifestaciones absurda figuran como conductas normales, entonces se encontrará sumergido de un solo golpe en el seno de lo fantástico...".
Es decir, según Todorov, si en el texto que leemos pueden existir las dos posibilidades (que está sucediendo en realidad o que es fruto de la ficción) estamos ante un texto fantástico. Coexisten dos formas de interpretar el texto. Es como si estuviéramos ante una teoría de mundos paralelos: existen y no existen a la vez.
Lo fantástico es lo que nos lleva (al lector y al personaje) a "vacilar", a dudar de aquello que ha sucedido porque contradice las leyes naturales, el orden establecido y normal.
Pero Todorov no se queda ahí: propone tres conceptos: lo fantástico, lo maravilloso y lo insólito.
Por ejemplo:Camino del trabajo he visto un dinosaurio volando.
Posibilidad 1: ¿Es cierto? ¿Está sucediendo de verdad o estoy soñando? ("Lo fantástico")Posibilidad 2: Esto ha de tener una explicación racional. Estoy soñando o es algún tipo de proyección, un Blue Beam o algo similar...
Nos quedamos con la número 1: Sí, es un dinosaurio, lo está viendo todo el barrio. Es "lo insólito o extraño"Alguien nos dice que hay unas nuevas leyes de la naturaleza que explican este fenómeno.Entonces pasamos al terreno de "lo maravilloso".
Hemos visto entonces estos tres elementos de "lo fantástico", que siempre, no lo olvidemos,parte de la vacilación de lector o de personaje ante lo que está viendo.