Me llegó este libro gracias a la mediación de un compañero de clase que resulta ser amigo de la autora. Me comentó acerca de la próxima publicación del segundo libro de Lara, y de la posibilidad de reseñarlo en el blog. Por supuesto, le dije que sí, y en cuanto he sacado un hueco lo he leído del tirón, en apenas dos días lo he terminado. Por lo que eso es lo primero que os diré de la novela; se lee muy fácilmente.
Los acontecimientos que se dan en el libro suceden en tan solo 24 horas, lo que me ha recordado a After Dark, de Murakami, y desde el principio pensé que podría haber sido un acierto o un fracaso. En este caso, creo que ha sido un acierto, ya que se sale de lo "típico" de colocar las novelas en un tiempo espaciado. 24 horas para que nuestras protagonistas puedan resolver las situaciones y los conflictos que se van encontrando.
Comenzamos en un tercero sin ascensor, donde Silvia busca compañera/o de piso. Recientemente instalada en Barcelona, sus reparos a la hora de según quién incorporar al piso me han resultado muy familiares, porque recientemente he tenido que pasar por lo mismo, por lo que desde el principio, de alguna forma, me sentí bastante identificada con dicho personaje. A partir de esta búsqueda y de dos citas que tienen dos de las protagonistas, empieza a tomar forma la novela.
Se nos introduce a los personajes de la forma más pausada posible teniendo en cuenta que es una novela estructurada en una situación de apenas 24 horas. Esto hace que, haya algunos personajes secundarios que resulten bastante planos y en los que no encuentres demasiadas diferencias. En contraposición, las protagonistas sí que tienen todas una personalidad muy diferente entre ellas y un carácter bastante marcado. Personalmente, mi favorita fue Silvia y me sentí muy identificada con ella, aunque también encontré matices en Julia con los que empaticé. Quizá la que me resultó más lejana fue Lucía.
La novela tiene un ritmo bastante dinámico, y es de lectura fácil, como decía al principio de la reseña. Además, es un libro bastante entretenido; me sacó una sonrisa en varias ocasiones debido a las situaciones a las que se tenían que enfrentar las protagonistas, a veces demasiado absurdas para ser real, pero al mismo tiempo, tan reales como la vida misma, si ambas cosas pueden ser posible.
Es una novela que no es más de lo que parece, ni pretende serlo; una historia entretenida, sobre los líos de tres jóvenes y las personas de su entorno. Además, estas tres chicas evolucionan a lo largo de la novela, aunque solo pase un día. Hacen frente a sus miedos y temores para resolver los problemas que se van encontrando.
La parte negativa la encuentro en que, como decía, en algunos momentos parece que algunos personajes, principalmente los secundarios, son copias los unos de los otros porque no tienen una personalidad demasiado definida. También es verdad que, demasiadas situaciones insólitas se dan en un escaso margen de tiempo, por lo que te hace cuestionarte la veracidad en el sentido de que es muy complicado que en la vida real te pasen tantas cosas de golpe.
No obstante, es una historia muy amena y divertida, que además hace bastantes guiños a la ciudad de Barcelona y también al fútbol, pero sin ser necesario que te guste para embarcarte en su aventura. En mi caso, he tenido la suerte de ser seguidora del deporte por lo que me he sentido bastante identificada, sobre todo con Silvia -una vez más-, pero como digo, no es necesario que te guste el fútbol para poder disfrutar de esta novela realista y llena de humor.