Son días de Santos y Difuntos, Halloween o Samain, lo que tu celebres. Yo soy anti Halloween, así que la receta es de plan antigüo y repito con algún cambio.
Es dulce muy típico de estas fechas en Asturias, una delicia gastronómica cargada de calorías. Se rellenan de crema pastelera o de mazapán de almendra. Me apasionan las de Camilo de Blas en Oviedo a las que he intentado aproximarme. Tengo que confesar que están muy ricas y como os contaba aquí hace 3 años, #tengoquemejorar, me parece que éstas ya se van acercando y la mejoría se nota.
He seguido mi receta y añadido a la anterior espolvoreado harina junto con el azúcar glass para que la masa sea más manejable y no se pegue al rollo de amasar. Salvado este escollo tengo que decir que han quedado bastante buenas.
Teresitas de Almendra en Sartén II:
- 250 gr. de Harina de Repostería
- 75 gr de Manteca de Cerdo
- 100 ml de vino blanco
- 50 ml de agua tibia
- 10 gr de levadura fresca
- Una nuez de Mantequilla en pomada
- 1 cdta. de Azúcar
- Canela en Polvo y Azúcar
- Aceite de Girasol
- Sal
- Azúcar Glace y Harina
- 125 gr. de Almendra Cruda Molida
- Almíbar (100 gr. de Azúcar y 75 ml de agua)
Añade poco a poco la harina tamizada, amasa y forma una bola. Reserva en la nevera tapada con papel film durante media hora, la mantequilla se enfriará y te dejará manejar mejor la masa. Mientras tanto prepara el almíbar con el azúcar y el agua y si te apetece unas gotas de extracto de vainilla. Fuera del fuego incorpora la almendra molida. Te debe de quedar una crema compacta pero jugosa. (te va a sobrar, no te preocupes, prepara unos almendrados como estos, sólo tienes que añadirle las yemas de huevo).
Espolvorea la encimera con azúcar glace y harina. Amasa con el rodillo. Dobla formando un pañuelo, untas con la manteca de cerdo, deberás hacerlo varias veces. Extiende la masa con el rollo de amasar en una lámina de 1 cm de espesor y corta en cuadrados iguales del tamaño que más te gusten. Espolvorea cada poco con la harina y el azúcar glace
Rellena en medio de cada uno de ellos con la crema de almendra o mazapán, sella los bordes.
Fríes en abundante aceite caliente, te recomiendo que lo hagas de una en una y en un cazo para que esté cubierta por todos los lados. El aceite tiene que estar caliente pero deberás de tener cuidado para que no se te quemen por fuera y queden crudas en el interior.