Parece que esta gente no le hace ascos a esa sanidad pública que quieren destruir. No será tan mala como dicen, porque bien que acuden a ella a recibir un tratamiento que yo no se lo daría gratis. Que lo paguen. Dinero les sobra.
Lamentablemente, su estado no es crítico. Padece una infección pulmonar, taquicardia y problemas respiratorios. Desde aquí le deseamos un empeoramiento súbito. La humanidad antiimperialista y antiterrorista lo agradecería.