Una lástima lo de Vains of Jenna. Sin ser una mega-banda -hay que reconocerlo, tenían mejor look que canciones-, merecieron más suerte. Recuerdo que durante una temporada, tras mudarse de su Suecia natal a L.A. -dónde, según fuentes acreditadas, dormían en el coche-, fueron apadrinados primero por Gilby Clarke y más tarde por Bam Margera de Jackass -que tampoco es que sean unos "winners"- y parecía que su estrella empezaba a brillar ... para apagarse a los cinco minutos. Parece mentira, pero actualmente los States son un pésimo mercado para el hard/sleazy rock. Si hubiesen permanecido en Europa, las cosas probablemente les hubiesen ido mucho mejor. Que se lo pregunten a una banda tan mediocre como Hardcore Superstar...
En cualquier caso, su ex-lider, Lizzy DeVine, vuelve a la carga con The Cruel Intentions. De momento su discografía es raquítica y sólo cuentan con un single, este "Borderline Crazy", pero la cosa pinta bien. Si te apetece una píldora de hard con ramalazos power poperos, ya puedes darle al "play":
Y recordando a Vains of Jenna ...