Se trata de un viaje psicodélico en toda regla dividido en 5 cortes, donde se juntan como referentes la Velvet Underground, los Grateful Dead y Neil Young con sus Crazy Horse, pero además adornado con un toque de jazz experimental que por momentos te eleva a un estado increíble y difícil de explicar. Es un apasionante reto musical este disco, lo ha sido para sus creadores, pero también para el oyente, que te sumerge en un mundo lleno de sitares, saxos, teclados y como siempre guitarras.
Pues esta Cara B podría haber entrado perfectamente en el disco, un descarte glorioso, donde Steve Wynn frasea, mientras la música te va envolviendo, una delicia.
Os dejo con Hold brother hold.