Esa fue, básicamente, la idea máxima que extraje el pasado domingo 24 tras acabar de presenciar el concierto que The Frowning Clouds, una jovencísima banda procedente de Geelong y Melbourne -no lo tengo muy claro-, había dado en la Sala EgoLive de Alcalá de Henares.
Las reseñas previas que habíamos leído de ellos nos los pintaban como los herederos del Rock clásico de los años sesenta. Una definición que sinceramente me daba algo de miedo y de repelús, porque no me negarán que leer esas palabras y pensar de seguido en una vulgar copia de los Beatles o los Kinks subida al escenario y berreando himnos no va hilado...
Afortunadamente -siempre afortunadamente- resulta que estos chavalillos han bebido de esas fuentes británicas sesenteras, pero sin quedarse en la sólo en la superficie del género, ya que también están dotados de un genio creador que suele escasear en estos pantanosos y muchas veces estériles terrenos musicales de lo revival por los que se mueven con tan aparente soltura The Frowning Clouds.
Pero bueno, ataques de crítico a parte, con lo que nos debemos quedar es que lo mejor para esta banda está todavía sin lugar a dudas aún por llegar… Y ahí estaremos nosotros para dar fe de ello.
Y ya para despedirnos hasta el próximo concierto, ahí os dejo con el set-list. Así, en escorzo brutal es como pude conseguir fotografiar el listado de canciones del concierto que The Frowning CLouds tenían pegados al canto de sus guitarras... ¡Os quejaréis!