Curiosa historia le de la famila Levitt que lleva a la grabación de este, y único, disco. Sean Levitt a sus trece tiernos años de edad estaba en Central Park improvisando con su guitarra cuando fue descubierto por uno de los caza talentos de ESP y acabaron firmando un contraro donde incluían a los miembros de su familia junto a algunos jóvenes talentos del sello como por ejemplo,Chick Corea.Eso dice la historia. También que el padre, Al Levitt, era ún conocido batería de jazz , además de ser unos trotamundos. Al final el disco es un compendio entre el pop soleado pero con arrebatos de jazz rock debido al tipo de músicos que intervienen en la grabación. La madre del muchacho,Stella, se encarga de poner la voz del disco y su voz se pasea entre los distintos géneros que abraza el disco. La inicial "The Saints of My City Are Children", es toda una maravilla cercana a Free Design y a Astrud Gilberto en versión experimental, "Notes so High" sigue por senderos jazzisticos de club, "Springtime" por aromas Bacharach y "Candy" por melosos derroteros folkies, hasta llegar a los dos cortes finales que retoman la dinámica impuesta por los dos iniciales, dando brillo a un disco interesante y curioso para el sello y la época.
Curiosa historia le de la famila Levitt que lleva a la grabación de este, y único, disco. Sean Levitt a sus trece tiernos años de edad estaba en Central Park improvisando con su guitarra cuando fue descubierto por uno de los caza talentos de ESP y acabaron firmando un contraro donde incluían a los miembros de su familia junto a algunos jóvenes talentos del sello como por ejemplo,Chick Corea.Eso dice la historia. También que el padre, Al Levitt, era ún conocido batería de jazz , además de ser unos trotamundos. Al final el disco es un compendio entre el pop soleado pero con arrebatos de jazz rock debido al tipo de músicos que intervienen en la grabación. La madre del muchacho,Stella, se encarga de poner la voz del disco y su voz se pasea entre los distintos géneros que abraza el disco. La inicial "The Saints of My City Are Children", es toda una maravilla cercana a Free Design y a Astrud Gilberto en versión experimental, "Notes so High" sigue por senderos jazzisticos de club, "Springtime" por aromas Bacharach y "Candy" por melosos derroteros folkies, hasta llegar a los dos cortes finales que retoman la dinámica impuesta por los dos iniciales, dando brillo a un disco interesante y curioso para el sello y la época.