En el año 1987 The Long Ryders, la banda norteamericana, edita Two fisted files, una continuación gloriosa de sus primeros discos Native sons y State of our Union, una especie de antología, antes de su primera separación. Un disco infravalorado y no entiendo el porqué. Aquí hay temas imbatibles, algunos de ellos que no salieron editados antes, aparte de sacar su lado más rockero. Uno de mis temas favoritos de siempre de éste álbum es Guslinger Man, rock en estado puro, con las guitarras que corren y un estribillo demoledor, de esas canciones que da gusto ir escuchando en el coche a toda pastilla.El martes la escuché en vivo y sentí algo especial, fue como volver a recordar que cuando una banda lo borda te recorre algo por el cuerpo... no sabría explicarlo.
En el año 1987 The Long Ryders, la banda norteamericana, edita Two fisted files, una continuación gloriosa de sus primeros discos Native sons y State of our Union, una especie de antología, antes de su primera separación. Un disco infravalorado y no entiendo el porqué. Aquí hay temas imbatibles, algunos de ellos que no salieron editados antes, aparte de sacar su lado más rockero. Uno de mis temas favoritos de siempre de éste álbum es Guslinger Man, rock en estado puro, con las guitarras que corren y un estribillo demoledor, de esas canciones que da gusto ir escuchando en el coche a toda pastilla.El martes la escuché en vivo y sentí algo especial, fue como volver a recordar que cuando una banda lo borda te recorre algo por el cuerpo... no sabría explicarlo.