Sorpresa agradable la que ofrece The Owners tras un planteamiento poco prometedor: el de una violenta home invasion, subgénero del cine de terror algo gastado ya. Aquí son tres perdedores, Nathan (Ian Kenny), Terry (Andrew Ellis) y Gaz (Jake Curran) que deciden entrar a robar en la casa de dos amables y adinerados ancianos, el matrimonio formado por Richard (Sylvester McCoy) y Ellen Huggins (Rita Tushingham). A estos personajes se une Mary, interpretada por la cara más conocida de este film, Maisie Williams, conocida ex niña actriz de Juego de Tronos. Como ya he dicho, el planteamiento no promete más que las emociones fuertes de este tipo de películas en una línea argumental fácilmente predecible. Pero las cosas no son lo que parecen en esta cinta dirigida por Julius Berg, que adapta una novela gráfica belga, Une Nuit De Pleine Lune de Yves H. y Hermann. El primer desvío de lo esperado es un humor británico muy negro, que tiene tintes sociales -los jóvenes sin futuro enfrentados a los ancianos privilegiados- y que despista del todo gracias a la divertida interpretación del amable y educado señor Huggins -magnífico McCoy, lo mejor de la película-. Poco a poco, el argumento va desvelando sus secretos, que nos llevan a revelaciones cada vez más oscuras sobre quiénes son los supuestos protagonistas -los ladrones y Mary- y quiénes son las supuestas víctimas -esos entrañables ancianitos-. Sin querer revelar más, la película es divertida, violenta, y un descenso a los infiernos que lleva a momentos muy inquietantes y oscuros. Me permitirán ustedes comentar que me he acordado del clásico Arsénico por compasión (1944) de Frank Capra, salvando las distancias y en un giro mucho menos amable.
The owners (los propietarios) -sin compasión
Publicado el 03 marzo 2021 por Jorge Bertran Garcia @JorgeABertranSorpresa agradable la que ofrece The Owners tras un planteamiento poco prometedor: el de una violenta home invasion, subgénero del cine de terror algo gastado ya. Aquí son tres perdedores, Nathan (Ian Kenny), Terry (Andrew Ellis) y Gaz (Jake Curran) que deciden entrar a robar en la casa de dos amables y adinerados ancianos, el matrimonio formado por Richard (Sylvester McCoy) y Ellen Huggins (Rita Tushingham). A estos personajes se une Mary, interpretada por la cara más conocida de este film, Maisie Williams, conocida ex niña actriz de Juego de Tronos. Como ya he dicho, el planteamiento no promete más que las emociones fuertes de este tipo de películas en una línea argumental fácilmente predecible. Pero las cosas no son lo que parecen en esta cinta dirigida por Julius Berg, que adapta una novela gráfica belga, Une Nuit De Pleine Lune de Yves H. y Hermann. El primer desvío de lo esperado es un humor británico muy negro, que tiene tintes sociales -los jóvenes sin futuro enfrentados a los ancianos privilegiados- y que despista del todo gracias a la divertida interpretación del amable y educado señor Huggins -magnífico McCoy, lo mejor de la película-. Poco a poco, el argumento va desvelando sus secretos, que nos llevan a revelaciones cada vez más oscuras sobre quiénes son los supuestos protagonistas -los ladrones y Mary- y quiénes son las supuestas víctimas -esos entrañables ancianitos-. Sin querer revelar más, la película es divertida, violenta, y un descenso a los infiernos que lleva a momentos muy inquietantes y oscuros. Me permitirán ustedes comentar que me he acordado del clásico Arsénico por compasión (1944) de Frank Capra, salvando las distancias y en un giro mucho menos amable.