No tenía intención de publicar hoy ningún artículo pero hay planes que deben ser cambiados si algo extraordinario sucede. Una amiga de facebook, profesora, no de Wisconsin sino de la Mancha!!!, ayer publicó la extraordinaria, maravillosa y genial fotografía que encabeza este artículo y me ha tenido toda la noche dándole a la cabeza. Gracias [A]!. Realmente y sin exagerar, el fenómeno Tebow es, puertas afuera, lo más grande que ha sucedido en la NFL desde los tiempos de Montana.
No estoy diciendo que Tebow sea lo que no es. Ya conocéis mi opinión respecto al jugador. Pero mediáticamente no he visto a nadie traspasar las fronteras de lo que es estrictamente el aficionado a la NFL del resto de la población. En Estados Unidos se publicó esta semana una encuesta de la cadena de televisión ESPN según la cual, Tim Tebow es el deportista más popular del país. En diciembre, el Washington Post publicaba un artículo explicando cómo el juego de Tebow destruye el sistema de medición y valoración que tradicionalmente se ha utilizado para los quarterbacks NFL. Mariano Tovar contaba esta misma semana que su blog había superado el récord de entradas, superando las 40.000 visitas en los últimos siete días y, además, su mini intervención en un vídeo explicando lo que es Tebow había sido el más visto de todo el periódico, impresionante!. Y qué deciros de mi humilde blog, rozando ya las 100.000 visitas!. Todos sabéis que, en una vertiente puramente religiosa, la figura de Tebow también ha sido visible por parte de algunas publicaciones españolas y que en, una mezcla de religión, pundonor y sorpresa deportiva, otros periódicos españoles han elaborado mini-reportajes sobre el quarterback de los Broncos.
Lo cierto es que la última vez que el mundo de la NFL estuvo mínimamente presente en la calle fue durante la época Joe Montana. Eso significó que nuestra pandilla se daba cita puntualmente para ver los partidos de NFL que TV3 ofrecía allá, por los inicios de los años ochenta.
Recuerdo que, en el patio del colegio, algunos zumbados transformaban el conocido "balón prisionero" por una variedad un tanto extraña de "eso que también se llama fútbol". Me apunté los dos primeros "partidos". En el primero le casqué un buen codazo a uno que me caía especialmente mal. En el segundo, el agredido se convirtió en angel vengador y decidí que en aquella nube de polvo se necesitaba una reglamentación, así que me pasé al baloncesto.
Tebow como fenómeno mediático ha vuelto a poner este deporte en los medios. Por supuesto que la información de lo que sucede en la liga dista aún mucho de corresponder a la importancia que merecería. El fútbol es en España aún un deporte minoritario, pero no somos un ghetto. Existen clubs que se agrupan alrededor de una liga, jugadores que entrenan duro y tantos seguidores como para hacer que Canal Plus dedique una excelente cobertura de este deporte. Signo de que los números tienen que ser buenos por necesidad. La idea debería ser la de aprovechar este pequeño tirón mediático para dar continuidad a lo que es puramente este deporte. Visto el panorama, soy bastante excéptico, la verdad.