Sinopsis: Traducción personal
En el juego de la seducción, no hay reglas
Como propietario del más escandaloso club de Londres, la última cosa que el notorio Marqués de Roth quiere es una mujer. Mantener su falsa reputación de calavera trae clientes adinerados – dinero que él necesita para una noble causa. Aunque todo en su interior le dice que no deje a su bella e inocente esposa en su finca... debe hacerlo.
Pero tres años más tarde, cansada de que el sinvergüenza de su marido encabece las páginas de cotilleos, Lady Isobel Vance decide que ya es suficiente. Ya no es una gatita frágil, sino que, como autora anónima de una columna de consejos sexuales para mujeres, ahora es una tigresa y puede sacar sus garras.
Isobel decide ir a verlo a Londres y canaliza sus artes de seducción para hacerle rogar que la acepte. No esperaba que su marqués fuera igualmente irresistible.
Ahora comienza el juego para ver quién cederá primero ante el otro, con ambos decididos a ganar.
Opinión personal:
Calificación:Esta novela es la primera que leo de Amelie Howard. Un fallo por mi parte porque hay algunos detalles con los que me he encontrado algo perdida y quiero entender que aparecen en la primera novela de esta serie.
Una amiga me las presta, así que las leo sin plantearme si forman parte o no de una serie. En algunas se nota más que en otras y, como tampoco he leído el primero, no sé muy bien si la información que creo que me falta está reflejada en el título anterior o, quizás, en otra novela de otra serie.
Y, justo como mi amiga comenta, esta lectura es un salto de fe. No hay que buscar mucha lógica.
¿Es entretenida?: sí
Y, si digo la verdad, me lo he pasado bastante bien con la lectura.
Más o menos la sinopsis resume la primera parte de la novela. Para mi gusto, da demasiada información, porque, como lectora, descubrir lo que se esconde detrás, tanto del falso papel de calavera de Roth como de la decidida Isobel, es un aliciente añadido.
Al mismo tiempo, justo en los protagonistas es donde más fe tienes que poner. Hay cosas, que me restan mucha credibilidad a la historia —algo que, si ya vais conociendo mis gustos, es muy importante para mí.
Roth, ese juerguista encubierto, ese marques dueño de uno de los locales de vicio más aclamados de la ciudad, pero con una lealtad inesperada a una mujer con la que decidió casarse un día con un fin muy determinado que no he llegado a averiguar… me cuesta. Un hombre de honor que ha vivido toda la vida alejado de su familia por sus prejuicios y por la mala gestión de sus ideas.Isobel sorprende, al menos a mí sin saber exactamente cual ha sido su pasado y sus circunstancias. Es una joven decidida y, desde luego, resolutiva, pero de la que sus artes y conocimientos me cuestan asimilar.
Dejando de lado el papel de algunos personajes secundarios cuyo papel no he terminado de entender. Quiero entender que son figuras importantes y que vienen de otras historias o que, en un futuro, contarán con la suya propia. Pero en esta historia, al menos las dos hermanas gemelas, me han tenido totalmente perdida y en sus apariciones, muy descolocada.
Dicho todo esto, no quiero que tengáis la sensación de que es una lectura que me ha defraudado porque me lo he pasado bastante bien con ella.
La historia cuenta con dos partes bastante diferenciadas.
La primera es la que concierne a la relación entre ellos. Me lo he pasado muy bien con la insistencia de Isobel —aunque disfruto más cuando no son de perdonar tan fácilmente (quizás los sentimientos de ella vienen de antes) y no entiendo muy bien el cuando y el porqué; pero me ha gustado su determinación y su insistencia. Algunas situaciones entre ambos, sobre todo con cierta «doble personalidad» por decirlo de alguna forma, me han chocado, pero disfruto de esos rifirrafes y la segunda parte da comienzo cuando los sentimientos ya están afianzados y entra en juego el pasado y ciertas aventuras.
No soy muy dada a estas protagonistas que lo mismo te cosen un vestido que se enzarzan en un combate a espada. Como digo, no me parecen personajes creíbles y, menos en una novela histórica, en la que las mujeres no tenían acceso, ni de lejos, a este tipo de enseñanzas. Repito que es un salto de fe y, aunque son escenas muy entretenidas, esta segunda parte me ha hecho que la novela en general bajara un poco de nivel. Creo que la autora ha perdido los papeles en crear una protagonista tan terriblemente perfecta. Como si la historia entre ellos, para ella, ya estuviera determinada y se haya quedado sin recursos y decide meter batallitas y demás para alargar algo concluido.
«The rakehell of Roth» me ha parecido una novela que ha empezado mucho mejor de lo que termina. Son personajes algo ligeros, que se merecen más profundidad, y en el que él está mucho mejor llevado que ella. Roth es un hombre al que puedo entender, sus miedos y ese sentimiento de traición ha determinado en lo que se ha convertido y nada en él es lo que parece. Con Isobel creo que la autora ha exagerado demasiado. —de Clarissa mejor no comento nada—.
Tenía una pinta estupenda y la primera parte me ha gustado bastante. Estos personajes algo modernos «insertados en épocas antiguas» parece ya una lucha perdida. Es una novela en la que la parte erótica tiene muchísimo peso, sobre todo al principio, quizás un peso excesivo —algo que me ha costado aceptar, quizás es otra autora que se suma a las modas actuales en novela histórica, por lo que considero que es muy posible que sea una muy buena opción.
Datos de interés: Ficha de la novela - Ficha de la autora - Web de la autora
Pepa