Portada del tomo
Cuando Neil Gaiman comenzó la serie The Sandman marcó el principio de una saga, una historia que se extendería más allá del tiempo y que años después sigue siendo objeto de estudio. Y uno de los aciertos que tuve fue dotar al protagonista de una familia…
En los primeros números se intentó encuadrar al personaje dentro de la continuadad regular de DC Comics, haciendo aparición varios superhéroes pero no fraguó y finalmente estaría aparte (aunque compartiendo universo) desarrollando sus propioas historias y conformando un mundo lleno de fantasía. En esas páginas también hizo su aparición su hermana, la encarnación antropomórfica de La Muerte (y llamada únicamente Muerte) que casi llegó a eclipsar al propio Morfeo.
Aunque ya tenía sus rasgos bien definidos, con su delgadez y su sombrero de copa, la popularidad y la imagen más conocida que tenemos de ella se debe a Chris Bachalo y en gran parte al trabajo que hizo con ella en El alto coste de la vida y Lo mejor de tu vida, que son precisamente las dos historias principales que se incluyen dentro de este tomo.
No me pararé en decir nada acerca de estas dos obras, más que conocidas y el poder tener ambas juntas en una buena edición es motivo más que de sobra para comprarlo, pero sí hay que pararse en el cambio que supuso su creación.
Neil Gaiman concibió al personaje de Sueño para ser algo aterrador, la frase promocional era de hecho “Te enseñaré el terror en un puñado de polvo”. Su rostro era pálido, vestía de negro y estaba alejado de la humanidad. Se daba un vuelco al concepto de los sueños en calidad de algo hermoso, y se huyó a propósito de la dulce visión que daba Little Nemo. Si él era el rey de ese mundo, de ese onírico lugar, entonces teníamos motivos para temer y asustarnos. Pero no terminó todo ahí, ya que con Muerte hizo lo mismo, pero al revés.
De forma popular la representación de La Muerte no ha sido benigna. Es el final de todo y de todos, con lo que tenemos motivos más que de sobra para no ser amables con ella. Muy pocos autores han dado una visión distinta, partiendo de la descacharrante que hace Terry Pratchett, ya que no es precisamente tarea fácil pero el creador de The Sandman lo logró.
Si el protagonista muestra frialdad no es así con su hermana, que es dulce y amable, una jovencita de unos 16 años, divertida a la que le gustan las mariposas. Ella sabe que su trabajo es terrible, que nadie quiere acompañarla y por eso intenta comprender a los humanos. Su amor por nosotros llega hasta tal punto que una vez cada cien años se da la oportunidad de vivir, de disfrutar de nuestras penas y placeres, y finalmente morir siendo recogida por ella misma.
En El alto coste de la vida y Lo mejor de tu vida se extiende todo esto, dotando a esta entidad antropomorfa de un fondo, de unas intenciones y de un carácter complejo y bien conformado. Nadie diría que, al menos de primeras, se pueda querer que llegue el momento y conocer a aquella que se nos ha de llevar, pero si es una décima parte de lo que ha salido de la mente de Neil Gaiman entonces iremos encantados.
Doc Pastor
Hace tiempo inicié Ruta 42 (@ruta42 en Twitter), una gaceta para la que dedico la mayor parte de mis escritos y fotografías. También colaboro actualmente con el periódico AQUÍ en Valladolid y en la revista LaRAÑA de Sevilla. Cuando no estoy por aquí es que estoy jugando con mi perrito (se llama Loki).
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