The Seasons of my life, Capitulo 4

Publicado el 03 septiembre 2018 por Annagrey
lo se, lo se.... cada año la autora escribe un capitulo nuevo....pero no se preocupen ya me encargue de amenazarla, porque si tarda mucho otra vez....las consecuencias serán graves.
Si es la primera vez que ves esta entrada...es posible que quieras leer los primeros 3 capis.
Capitulo 1
Capitulo 2
Capitulo 3
Capítulo 4Season
   Era difícil concentrarme en otra cosa que no fuese manejar. Seally me pidió que lo hiciera, alegando que alguna vez tenía que superar el miedo a morir en este asiento. Tengo que manejar este coche con delicadeza, ya que las velocidades son una locura si no modero mi fuerza en el pie. Odio estos coches. En realidad, odio todos los coches, pero no siempre voy a tener a Seally para ser mi chófer y llevarme a donde quiera, cuando quiera. Así que aquí estoy, frente al volante, llena de nervios y preocupada por no chocar con otro auto o terminar estampada con un poste o una muralla.   El pensamiento me lleva de inmediato hacia mi primer encuentro con Xander y recuerdo como su playera se apretaba contra sus brazos y su pecho; imagino su rostro de nuevo y sus ojos son lo primero que llega a mi mente, son de un azul muy raro, uno que nunca había visto, una extraña combinación entre azul y morado, lleno de destellos que iluminaban a quien los miraba. No puedo dejar de preguntarme por qué se comportó de esa manera cuando preguntó mi nombre, en el exterior parece rudo con esos tatuajes, pero sus ojos me dicen todo lo contrario. Jamás me había puesto a pensar en lo que los ojos de las demás personas expresan hasta que vi los ojos de Xander. Estoy tan absorta en mis pensamientos que pego un grito cuando Seally toma el volante y lo gira hacia la derecha—: ¡Maldición, Season! —Grita y muevo el volante tratando de estabilizar el auto— ¿Dónde mierda tienes la cabeza? ¡Estabas a punto de chocar por no entrar a la intercesión con tiempo! —grita Seally de nuevo. Tiene el rostro rojo y sus ojos se ven preocupados y enojados al mismo tiempo—. Nos pudiste haber matado. ¡Frena el auto y bájate, voy a manejar yo, por siempre y para siempre! —dice.    Mi corazón late con rapidez mientras estaciono el coche y pongo el freno de mano. Con manos temblorosas desabrocho mi cinturón de seguridad, de reojo veo a Seally bajarse del auto y el estruendo de su puerta cerrándose me deja saber lo molesto que está. No voy a llorar. Abro la puerta y pongo un pie fuera del coche, respiro con dificultad. No voy a llorar. Saco mi otra pierna y recargo mis manos sobre mis rodillas. Sigo sin poder respirar bien. No voy a llorar. No voy a llorar. Me impulso y salgo del auto—: ¿Qué mierda estabas pensando, Season? —grita Seally de nuevo mientras estoy dando la vuelta al coche, me aparqué a un lado de la carretera, así que solo hay coches y pasto del otro lado. No es una carretera muy concurrida, pero la intercesión donde tenía que entrar, se desvía de la nada, si no doblaba, literalmente íbamos a terminar estampados frente a una muralla.    —Yo… —balbuceo. Mi voz empieza a temblar y sé que Seally ya sintió lo que está a punto de pasar porque en dos segundos estoy envuelta en sus brazos y comienzo a llorar desconsoladamente. Mis sollozos son tan fuertes que me quedo sin aire. Comienzo a gritar y es aún más difícil respirar. Enormes lágrimas caen por mi mejilla e inundan mi rostro, empapando la camisa de Seally.—Nena, por favor, cálmate. Tienes que respirar. Discúlpame por lo que dije y por gritarte, pero por favor, tienes que calmarte —me dice al oído mientras acaricia mi espalda, su voz suena preocupada. Pero me es imposible calmarme. El llanto y los recuerdos llegan y de repente tengo 12 años de nuevo y estoy envuelta en esta oscuridad que no me permite ver, sentir o escuchar nada. No puedo decir por cuanto tiempo nos quedamos parados, Seally envolviéndome en sus brazos y tratando de tranquilizarme. El miedo y cansancio del día toman lo mejor de mí y solo siento como mis piernas fallan, tirándome al suelo. Solo recuerdo ver el pecho de Seally y el olor a piel del asiento del auto. ***—No debiste haberle gritado, Seally —escucho la voz intranquila de mi mamá. Abro los ojos y estoy en la habitación de mis padres, rodeada de almohadas cubiertas en seda y veo el rostro preocupado de mamá encima de mí—. Ya despertó, avísale a tu padre —le dice a Seally. Lo escucho salir de la habitación y trato de sentarme, encontrándolo imposible. Mamá me sonríe y me ayuda a enderezarme—. ¿Cómo te sientes, mi niña? —pregunta mamá.—Lo siento tanto, mami —digo entre lágrimas, el llanto ya no es tan intenso como hace rato, pero la culpa de lo que casi nos pudo haber pasado me consume—. No lo vi y … —mamá me abraza y no me deja terminar de hablar.—No ha pasado nada, mi amor. No tienes por qué disculparte. ¿Crees poder caminar? Vamos abajo y te preparo un té —dice.Asiento y me levanto con ayuda de mamá. Bajamos las escaleras en silencio y llegando al último escalón veo el rostro de papá, quien corre a abrazarme—. Season, ¿te encuentras bien? Llegué tan rápido como pude —me dice con preocupación, veo el alivio en sus ojos. —Estoy bien, fan. No debiste salirte del hospital —respondo, y sonríe al escuchar su apodo, me siento culpable por haber causado este desastre familiar. Seally está detrás de papá, esconde su rostro y sé que se siente culpable por haberme gritado—. ¿Sea, puedes ayudarme a llegar a la cocina? —pregunto.Su rostro se alza y me mira expectante. Camina con rapidez y me toma del lado izquierdo, no queriendo quitar a mamá de mi lado derecho—: ¿Me perdonas, nena? —me dice en voz baja.Contemplo su rostro, verdadera preocupación inunda sus ojos. No debería estar pidiendo disculpas, soy yo la que casi choca el auto con nosotros dentro de nuevo, soy yo la responsable de que esto haya pasado, de nuevo. Me siento tan mal haciéndolo pasar por esto sabiendo lo mucho que ha sufrido él también. Beso su mejilla y contesto—: No hay nada que perdonar, Sea.
OMG! queremos mas!!!!!!!!!!!!