Un hombre solitario traumatizado por una pérdida, una policía con remordimientos de conciencia y moralidad elástica. Personajes paradigmáticos en busca de un psicópata de manual en un thriller policíaco rutinario y clónico. Rutinario porque se limita a poner en imágenes lo que ya se ha visto tantas y tantas veces, clónico por exactamente lo mismo, carecer del menor conato de peculiaridad en los giros narrativos o en cualquier otro planteamiento. No es que sea un producto del todo defectuoso, funciona dentro de sus limitaciones y sabe mantener un nivel digno de tensión, pero es que por añadidura remata con varias inconsistencias en un clímax apresurado y desajustado, algo inexcusable en el género.
Puntuación @tomgut65: 4/10