Imaginemos a un chaval loco por la música, delgaducho, moreno y de pelo negro cayendo sobre los hombros, incipiente bigotillo y ojos de vicioso, je, je, je, ese era yo. No necesitaba el típico cubata en la mano para salir a la pista, ni hacer de mimo tocando una guitarra invisible o dejarme acompañar por cuatro heteros borrachos para hacer el chorra, nada de eso, yo iba a mi bola, saltaba a la pista y la música salía a toda pastilla por los altavoces, y el nene flotaba en el cielo bajo las luces de los focos de colores, y se movía conforme pedía cada canción, porque si hay algo que detesto es el típico gilipollas haciendo los cuatro mismos pasitos para todas las canciones, ja, ja, ja, ja...
Solía robarle alguna que otra camisa blanca a mi padre, compraba pintura metálica de color dorado o plateado y me inventaba estampados que luego intentaba copiarme algún que otro capullo; me colgaba algún lazo negro del cuello, unos vaqueros, zapatillas de deporte, y a bailaaaaaaaaarrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr... Las primeras horas ponían música actual, las últimas novedades que sonaban por la radio, y yo bailaba exclusivamente las que sólo me gustaban; luego venía una hora de baladas lentas para restregar el paquete a las nenas cachondas, y después de todo eso, venía lo mejor = ROCK AND ROLL ...
He aquí una muestra:
Rare Earth - “Get ready”
Ram Jam - "Black Betty"
Led Zeppelin - “Whole Lotta Love”
Patti Smith - “Gloria”
Deep Purple - “Smoke on the Water”
Xim #10