Se llama Tian al recipiente provenzal de gres o terracota que se utilizaba para asar verduras en el sur de Francia. Por extensión, al igual que ocurre con la paella, el nombre del recipiente da lugar al propio plato, que contiene verduras asadas dispuestas de una manera armónica y ordenada.
Se puede hacer un tian de cualquier verdura mediterránea: calabacín, berenjenas, nabo... con o sin queso e incluso se puede hacer con frutas. Lo que no debe faltar es el gratinado en el horno. Yo elegí las patatas pues trajo la tía Paula, de Fariza de Sayago, en Zamora unas patatas de su huerta maravillosas.
Se puede comer sólo o como acompañamiento de pescados o carnes, a vuestro gusto. Yo aproveché para acompañar a un lomo de cerdo al ajillo con queso:
Para 4 personas:
- 3 patatas medianas
- 3 tomates
- 2 cebollas dulces medianas
- 2 dientes de ajo
- aceite de oliva virgen extra (AOVE)
- sal y pimienta
- perejil
Se precalienta el horno, con calor arriba y abajo, a 200ºC.
Se pelan las patatas y se cortan el rodajas no muy gordas. se lavan los tomates y se cortan también en rodajas del mismo tamaño, más o menos, que las patatas.
Se pela la cebolla y se corta también como las otras verduras.
Se añade un poco de aceite de oliva a una fuente de horno y se van disponiendo las verduras alternadas, como en la imagen:
Se salpimenta, se añaden los dientes de ajo muy picados por encima y se pone un poco más de aceite. Se introduce en el horno durante 30 minutos.
Se baja la temperatura del horno a 150ºC y se mantiene otra media hora más.
Se sirve caliente con tomillo natural espolvoreado o bien con perejil.