Ojalá haya mascarillas de protección frente al gobierno, pero más aun las necesitamos frente a los ministros y demás personales de las administraciones públicas, que evidencian su egoísmo y su incultura convivencial cuando se pelen cual verduleras (que me perdonen las adorables profesionales así llamadas), se niegan a lo que es evidente, mienten más que Pinocho, y rectifican cuando y cómo les conviene, olvidándose de los ciudadanos, que vienen a ser para ellos como aquellos diminutos bultos que el genial Orson Welles señalaba a Joseph Cotten desde lo alto de la noria del Prater vienés, en aquella para mí magnífica película de Carol Red titulada “El tercer hombre”, pues esos
“Se piensa que lo justo es lo igual, y así es; pero no para todos, sino para los iguales. Se piensa por el contrario que lo justo es lo desigual, y así es, pero no para todos, sino para los desiguales” Aristóteles (384 AC-322 AC) Filósofo griego.SALVADOR DE PEDRO BUENDÍA