Tiene que saber que existe otra vida.

Lleva toda su vida en el refugio, entró siendo un cachorro y nadie se ha fijado en él. Es un perrito cariñoso y juguetón que no conoce el calor de un hogar, nunca ha disfrutado de un paseo por el campo, por la calle, por la playa...No conoce el olor de un árbol, la comodidad de dormir en una camita calentito, el placer de jugar con un hueso...Por favor, dale de la oportunidad de conocer el mundo que está detrás de la jaula. Sólo tiene 4 años, le queda toda una vida por descubrir. Ayudarlo. 
Está En Rota. Cádiz. 

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