de pronto la lluviay recuerdas que el cielo es una fotografíaigual que tú estás lleno de niños por dentrocuando los charcos crecen,entre manchas de merienday una extraña sensación de eternidad fuimos creciendoy hoy hay restos de trajes de damas por los rinconesy un señor muy serio anunciando corbatas sin piedadnosotros sólo quisimos gritar fuerte y andar descalzosporque nunca entendimos cómo esopodía ser peor que los ojos en jaulastarde o temprano tuvimos que elegiry todos preferimos quedarnos solospara poder seguir chillando sin zapatos,alguna vez nos encontramos unos con otrosy entonces sonreímos de un modo salvaje,casi triste
isabel garcía mellado*cómo liberar tigres blancos*ed.YaLoDijoCasimiroParker
madrid2010