Lo más sorprendente es que ¡opta también al Oscar! El día 26 de febrero esperamos verle recoger la estatuilla en Hollywood, y agradecer a sus alumnos de UIC Barcelona -eso le he pedido- toda la ilusión que le transmiten en sus clases.
Todos los estudiantes y los profesores (conmigo a la cabeza: yo me he declarado el "fan nº 1 de Arturo") le agradecemos lo que ha hecho por nuestra Universidad, y todo lo que impulsa a soñar a nuestros estudiantes de Comunicación Audiovisual.
El Goya fue anoche un notición para toda la familia (Aunque no una sorpresa: seis días antes le habíamos acompañado a recoger el Gaudí). Yo seguí anoche la ceremonia por Twitter, porque en mi casa estábamos viendo una película. Y de repente... un wasap de mi hermana anunciando que van a entregar el premio al mejor cortometraje. Logro que dejemos la peli unos momentos y pasemos a la 1. Son momentos de tensión y de esperanza. Y, de repente ¡Timecode es el ganador!
Los hermanos andamos bastante dispersos (en Roma, Bombay, Tarragona, Barcelona), pero pudimos celebrarlo juntos gracias a las nuevas tecnologías: la distancia física fue salvada por mails, wasaps, llamadas de wasap, SMS…
La verdad es que Arturo es un genio. Ha sabido seleccionar bien los proyectos que quiere producir, como señala en la entrevista que le hicieron anteayer en El Confidencial. Ahí le calificaban de "apóstol del cine humano que nos hace mejores". Y es que él no sólo ha sabido organizar los proyectos para que pudieran convertirse en películas, sino que ha sabido elegir los guiones que iluminaran la vida de los espectadores. Su cine es un cine que aporta valores y ayuda a pensar.
Hace cinco años, produjo un cortometraje titulado “La historia de siempre”, con el que cosechó más de 130 premios: en festivales prestigiosos como los de Lucania (Italia), México D.F., Montecatini (Italia), Seattle (U.S.A.), Honk Kong (China), Cartagena de Indias (Colombia) o San Diego (U.S.A).
Al año siguiente su película “El barco pirata”, del que hablé en su momento, ganó en 2012 el Goya al Mejor Cortometraje de Ficción. ¡Fue una gran alegría que compartimos pocos días después toda la familia! (La foto de al lado nos la hicimos una semana después, y en ella se me puede ver más feliz aún que el propio Arturo).
Un año más tarde, “El corredor” obtuvo en la SEMINCI el premio al Mejor Cortometraje Europeo, lo que le permitió representar a nuestro país en los premios EFA (European Film Award), los más prestigiosos del cine europeo. Después ganó en los Gaudí, como ya conté en esta página, y ha estado presente en las secciones oficiales de muchos festivales: Flickerfest, en Australia; Clermond Ferrand, en Francia; Palm Spring, en California...
Pero lo mejor para Arturo llegó anoche: su tercer Goya con Timecode, una excepcional historia de amor sin palabras. Es el gesto, la mirada ¡y sobre todo, la danza! lo que va desgranando un argumento sorprendente y, a la vez, cautivador. Ésta es la sinopsis oficial: "Luna es una vigilante de seguridad que trabaja en el parking de unas oficinas. Cansada de su trabajo y de su jefe, se turna con Diego, a quien apenas ve unos segundos al día. A partir de un curioso hallazgo, Luna descubrirá una manera de comunicarse con su compañero".
En palabras de Arturo, "Timecode está llamado a ser el cortometraje español más importante de la historia". Y no le falta razón: Palma de Oro en Cannes, Gaudí al mejor corto, ¡Goya anoche con todos los honores! (Aquí el momento en que recogen el Goya). Y ahora afronta con esperanza el reconocimiento de la Academia de Hollywood. ¡El Oscar sería la locura completa! Y como dice Óscar Sueiro, profesor de Cine en UIC Barcelona: "Este corto es una maravilla; tiene arte, tiene emoción, y tiene ese 'no-sé-qué' que solo encuentras en las obras maestras".
Como fin de fiestas, os dejo tres regalos: el tráiler de Timecode (el corto no está disponible, porque está en el circuito de los festivales), el Making of de la cinta y el primer gran corto de Arturo: "La historia de siempre". Que los disfrutéis.