Tipo de profesores 6

Publicado el 20 octubre 2014 por Contagiandolocuras
¡Hola lectores!
El día de hoy les presentaré la última de las publicaciones sobre la temática acerca de los tipos de profesores, sin embargo, si en un futuro llego a pensar en otros que pueden ser añadidos en la lista (o si ustedes me los sugieren), no me la pensaré dos veces para añadir una nueva publicación al respecto.
Definición del maestroEste tipo de profesor concentra sus esfuerzos en un alumno en particular por alguna razón, durante el tiempo que duren las clases, esa persona será la encargada de atormentar al alumno tanto como le sea humanamente posible. Puede llegar a leer o a ver películas y series para aprender nuevas técnicas, incluyendo volverse experto en mensajes subliminales, jugar con la mente de los demás, hipnosis y el entrenamiento de gallinas para que ataquen al recibir la señal, para aquellos que crean que las gallinas no son peligrosas, es por que nunca han jugado ningún videojuego de la saga de Zelda.
Por lo general solo se enfocan en un alumno máximo por clase, aunque a veces pueden llegar a elegir hasta tres o cuatro al mismo tiempo, aunque estos casos son pocos ya que prefieren dedicar sus esfuerzos a uno por vez. Exceptuando eso, a los demás estudiantes los trata de manera normal.
Con respecto a la manera de dar la clase, aquí no hay ninguna técnica específica, así que este tipo de profesores pueden estar combinados con otros de los que he descrito anteriormente, ahora que si tienes un profesor que te da una clase difícil y que pertenezca al tipo de los que hablan y necesitas un diccionario para entenderle, y además de eso, que también sea de los que tratan de dificultarte la clase lo más posible, entonces estarás en una situación no muy buena que digamos.
Manera de actuarEn resumen, buscan maneras de atormentarte, desde las usuales como ser el primer candidato a las horas de las preguntas (aunque esto solo funciona cuando es una clase que no manejas bien, en caso contrario esta técnica no funcionará), ser realmente estricto a la hora de revisar tus exámenes o pruebas (pobre si te equivocas en lo mínimo, puedes perder puntos si te olvidas de un acento, ya ni digamos si usas una palabra que no sale como en el libro) y estar al pendiente para lanzarte el borrador sacarte del aula en cuando te vea hablando o distraído.
A veces pueden usar métodos más ingeniosos, por ejemplo el exceso de tareas:
—Muy bien, entonces la tarea para mañana será responder las preguntas del 10 al 20 y un resumen de al menos cinco párrafos sobre el capítulo uno del libro. Excepto para usted Josefo, usted traiga listas las preguntas del 10 al 50 y un resumen no menor de 500 palabras acerca del libro completo, además venga preparado para un examen sobre lo que se ha visto durante el semestre.
O quizás intenten algo como inculparte por cualquier cosa que ocurra en el aula:Si alguien hacía escándalo, o se arrojaron bolas de papel durante clases, o si algo se perdió o incluso si el día amaneció lluvioso, la culpa según la opinión del maestro, será de ese alumno, prácticamente usándolo las acusaciones como dardos del tiro al blanco para ver con cual acierta (aunque seamos sinceros, hay alumnos que si serán culpables de todas esas acusaciones).

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¿Que hacer en esos casos?Bueno, lo primero es ver que es lo que originó eso, muchas veces será a causa de algún malentendido o de no haber empezado muy bien que digamos, en cuyos casos quizás baste con una charla civilizada, en otros casos el problema no podrá ser resuelto de esa manera así que queda la opción de buscar quizás como hablar al respecto con el rector del lugar ya que todos merecemos un trato igual, y claro, siempre quedan otras opciones como:
  • Hablar con el presidente.
  • Hacer huelga de hambre.
  • Lamentarse en algún rincón.
  • Usar una identidad falsa.
  • Llegar a un acuerdo que incluya nombrarlo heredero de una península.
  • Prometer que dejarás de una vez por todas de usar bombas de humo durante los exámenes.
  • Firmar un tratado de paz.
  • Fingir amnesia.
  • Culpar de todo al sujeto de mirada sospechosa y que siempre habla acerca de que alguien le robó sus calcetas (si esta descripción aplica contigo, entonces culpa de todo a alguien más).
Y estas son solo algunas de las opciones, estoy seguro que cada uno podría nombrar muchas más. Como puedes ver, soluciones hay muchas así que solo queda ver cual se aplica mejor en tu caso, aplicarla y claro, siempre tener un plan B listo por si acaso.
Y sin más que decir, solo me queda despedirme por ahora, desearles un excelente día y recordarles que estén siempre alertas ante el ataque de las gallinas, pueden aparecer cuando menos te lo esperas. Como pregunta para ustedes, ¿han llegado a tener algún maestro así?
¡Hasta luego!