El narrador en primera persona
En el narrador en primera persona es el propio personaje quien cuenta la historia y configura el eje central de la trama. En este caso, su acceso a la información de otros personajes y hechos es restringido y totalmente subjetivo, condicionado por sus creencias y pensamientos.
Para utilizar un narrador en primera persona y que sea creíble, es imprescindible conocer mucho al personaje y a su voz interior. Debemos recordar que el narrador hablará igual que lo haría el personaje, ya que los dos son uno, y por tanto si nuestro personaje es un villano malhablado, la narración deberá ser acorde a él. De esta forma, conseguiremos que la narración sea lógica y coherente al carácter del personaje, le aportaremos credibilidad y configuraremos una comunicación directa entre él y nuestros lectores.
No obstante, solemos tender a asociar la narración en primera persona al protagonista de la novela, cuando no tiene por qué ser así. Podemos emplearlo desde la perspectiva de un personaje secundario que narre la historia del protagonista. Un ejemplo muy conocido serían las novelas de Sherlock Holmes, en las que las historias se narran desde el punto de vista del Dr. Watson.
El narrador en primera persona suele ser muy buena opción para escribir novela negra, epistolar, bibliográfica... Aunque realmente lo podéis emplear en cualquier género que os guste :)
Ejemplos de libros escritos en primera persona.
¡Y hasta aquí el post de hoy! ¿Qué narrador es el que soléis emplear vosotros? ¿Con cuál os sentís más cómodos? Espero que os haya servido y que hayáis aprendido algo nuevo sobre el narrador en primera persona. Recordad no confundirlo con el narrador equisciente. ¡No te vayas sin suscribirte y compartir el post para que pueda ayudar a más escritores como tú!