Noviembre ha llegado y con él, oficialmente se acabó el “veroño”. Y con la entrada del otoño llega el nuevo dilema: ¿qué ha pasado con nuestro pelo durante el verano? Ya sea porque durante el verano no hemos tomado consciencia, o por la llegada de la nueva estación, nuestro cabello ha empeorado.
¿Cómo intentar recuperar nuestro cabello reseco, sin fuerza ni brillo?
Tips de recuperación rápida:
- Un corte: los cambios no son malos, a veces es necesario recortarse un poco, o bastante las puntas. Quizá si lo tenemos muy quemado o tenemos las puntas muy estropeadas, es la opción más fácil y rápida para recuperar parte del cabello. Aunque es cierto que debemos seguir otros pasos, no hay que temer esta opción.
- Sesiones de Cauterización: es el tratamiento perfecto para el pelo poroso, roto y quebradizo. Dependiendo del estado en el qué tengáis el pelo necesitareís una o más sesiones, pero merecen realmente la pena. Podéis conocer más acerca de este tratamiento aquí.
Tips de recuperación progresiva:
- Peeling capilar: con una limpieza profunda del cuero cabelludo logramos retirar las células muertas y “despertar” el folículo para que fomente el crecimiento. Es aconsejable realizar este paso con un champú libre de residuos. Aquarela te enseña como realizar un buen peeling capilar en casa
- Champús y productos adecuados para cabellos maltratados: evitar cualquier producto externo que lo pueda empeorar, como champús con cloruro de sodio o pH 7.0 ya que pueden abrir en exceso la cutícula. Además, evitar decoloraciones, tintes, alcohol, que son cosas que ponen en peligro la salud de nuestro cabello.
- Descansar del uso de productos de peinado con calor: el calor debilita las fibras y abre la cutícula, haciendo que pierda la propia queratina y debilitando el pelo. Eso hace que el pelo se rompa mas fácilmente. Cuanto menos utilicemos aparatos como las planchas o el secador, mejor. Dejémoslo durante un tiempo, en la medida en la que podamos. Así daremos más tiempo a que el cabello recupere su estructura, frene la rotura, etc.
- Hidratación diaria: utiliza acondicionadores, ya sea el que se aplica en la ducha y se retira con abundante agua, o los spray que se aplican al salir de la ducha. Los primeros nos ayudan a que el cabello sea más manejable al peinarlo y aportan un extra de brillo. Los segundos aportan un extra de hidratación y nos ayudan a la hora de desenredar el pelo.
- Hidratación profunda: utilizar mascarillas hidratantes potenciadas con aceites para acelerar su efecto, como el aceite de argan, o incluso aceite de oliva. Dejar actuar la mascarilla lo máximo que podamos, es recomendable unos 30 minutos. También podemos aplicar aceites capilares con el cabello seco y dejarlo actuar lo máximo que podamos. Esto lo podemos hacer una o dos veces al mes, pero tener cuidado de no exponeros al sol con el aceite puesto, ya que podría quemarse. Aquarela te enseña como realizar una buena hidratación
Aplicando estos tips y siendo constante, damos fe de que se puede recuperar la vitalidad de nuestro cabello.
¿Te han resultado prácticos estos tips?
Si has puesto en práctica alguno, ¿cuál es el que mejor resultados te ha dado?
¿Qué haces tu para recuperar tu pelo con el cambio de estación?