Kelonia | Fantasía | Goodreads
#1 La ciudadela y la montaña #2 Títeres de sangre
“Eres la llave, trasgo. Capaz de abrir puertas y de cerrarlas”
Tras la destrucción de la Ciudadela, el continente es un lugar más convulso que nunca: los nobles intrigan tras los muros de sus castillos y vigilan las fronteras con recelo, a la espera de una guerra que muchos intuyen pero cuya magnitud nadie es capaz de imaginar. Algunos, alentados por la venganza o la gloria, afilan ya las espadas y disponen a sus ejércitos.
Los rumores se extienden como una sombra: en los bosques encantados aparecen criaturas de otros tiempos, mientras sus habitantes susurran crípticos augurios. Un gigante ha penetrado en el corazón de Esidia, la tierra de los trasgos, en busca de secretos. Fantasmas de ceniza vagan entre alaridos por el marchito reino de Corcia hacia un destino desconocido.
El Cuervo, el más siniestro de los consejeros de Thorar, se valdrá de estas amenazas para afianzar su poder… ignorante de que la más peligrosa de ellas se encuentra en los Picos Negros. Allí, fuerzas tan antiguas como el mundo están a punto de despertar mientras el Rey Trasgo se convierte, día a día, en aquello que más odia.
Nada más empezar me encuentro con lo que añoraba del primer libro, esa fantasía pura. Lo primero que he de decir es que el autor cumple mis deseos e introduce más magia y nos habla sobre otros seres, aunque tal vez no en la profundidad que me gustaría, pero es un gran paso que hace que el libro mejore pero con la distinción que tiene Alberto de contarnos un mundo desorientado en algunas partes y con ganas de guerra por otras, un mundo en continuo movimiento en el que nunca te aburriras pues siempre pasan cosas.
En esta segunda parte contamos con una mayor variedad de personajes, pudiendo dividirse en varias partes el libro. Mis personajes favoritos, así como sus respectivas partes, han sido Naié, quien era un personaje que me llamaba la atención desde el primer libro y quise saber mucho más de ella, y Fanagar, tanto de lo mismo, en el primer libro me atraía mucho y sabía que tenía cosas por contar. Fanagar me ha fascinado realmente por ser tan... peculiar -definición de Fanagar sin spoiler XD- Aunque tal vez, lo que más he echado en falta, es más rey trasgo, quien sigue teniendo importancia pero creo que me atrapó más en la primera historia, tal vez porque aquí aparece menos y me gusta ver su ambición, además de ser un ser diferente.
El problema de un libro con tantos personajes es que siempre queda alguno que te gustaría conocer más, y en este también me ha pasado. Que se definen bien y conocemos la parte importante, sí, pero siempre me gusta entrar en profundidad en aquellos que han despertando en mi un especial interés.
La narración continúa como en el primero, ni muy rápida ni muy lenta, aunque esta vez el libro se me ha hecho mucho más ligero, tal vez por no introducirnos tantas estrategias y luchas desde un principio. Tiene parte de lucha pero a su respectivo tiempo y no tan densa como en el primero y también nos da un gran paso en la magia, de lo que llega otro personaje que me ha resultado extrañamente entrañable, Margan, y del que quiero descubrir más. Creo que esta parte me ha gustado mucho porque en un momento me recordó a Trudi Canavan, autora a la que le tengo mucho cariño en el género fantástico, a pesar de que Alberto tiene sus diferencias, cuenta con un toque más crudo llevando a situaciones tal vez no tan crudas psicológicamente como alguna del primero, pero no se corta cuando debe meterte crudeza, y eso me encanta.
En resumidas cuentas y sin metiéndome en mucha profundidad para evitar soltaros algún spoiler, esta ha sido una historia que me ha gustado más, aunque comparando finales el primero me dejó más entusiasmada, considero que el libro en general se supera, nada más partiendo de un principio el autor me engancha y me hace no soltar el libro. Aunque, como me ocurre con libros donde hay varios protagonistas ubicados en distintos puntos, siempre hay alguna parte que se hace más pesada por el hecho de querer ir a otra. Aún así un libro fantástico que se lee rápido a pesar de sus casi 500 páginas y una historia que no te dejará indiferente.