Una noche, el ejército aéreo de Amatsukami asalta la residencia de los del Moral, apuntando a la vida de Fana, la futura emperatriz del enemigo. La joven dama consigue sobrevivir al ataque pero queda claro que allí no está segura. Así, se toma la decisión de enviarla a la Capital del Imperio. En principio, se envía a la flota de operaciones especiales pero son derribados en su mayoría. Como última opción por llevar al príncipe su prometida, la Fuerza Aérea de San Martiria contrata a un mercenario de sangre mixta, un "bestado", para llevar a Fana a la capital de Levamme en secreto en un Santa cruz, el avión biplaza más moderno que poseen. El piloto, Charles Karino, acepta la misión... pero atravesar un océano solo, en territorio enemigo, está lejos de ser una misión fácil.
ReseñaAlgo a comentar para empezar, que ya pasaba en la serie, es que hay nombres en español, algo que me hace mucha gracia, sobre todo cuando escuchas a los japoneses decirlos. Está Domingo García, Diego del Moral, el avión Santa Cruz... También tengo la duda con el nombre de la protagonista porque en unos sitios he visto que se llama Fana pero en otros sale como Juana, que iría más acorde al contexto, pero por mucho que ponga la oreja, nunca suena así cuando la llaman, por lo que opto por dejarla como Fana.
Entrando en la película en sí, tengo sensaciones encontradas. A ver si escribiendo la reseña soy capaz de explicarme y aclararme yo misma.
Por un lado, la historia es tremendamente básica y cliché: chica de clase alta con un paria de la sociedad sumado al tropo de que él le hace de protector y ella es la damisela en apuros. Mientras esté bien desarrollado, que se usen estos tropos no me molesta demasiado, pero es cierto que por su originalidad no brilla la película.
Quizás lo más interesante que tiene la película es el crecimiento lento pero constante de Fana, la protagonista. Una joven que siempre se limitó a aceptar las órdenes de su padre o un matrimonio de conveniencia sin amor va sacando poco a poco su voz. Por su parte, Charles es un personaje al que no le veo una evolución y me parece muy triste. Como mestizo, hijo de una mujer de Amatsukami y un hombre de Levanne, siempre ha sufrido discriminación y violencia y es considerado lo peor de lo peor, poco más que basura. Nunca se rebela contra esos desprecios, siempre agacha la cabeza y lo soporta todo estoicamente. Echo en falta que llegase a desarrollar un poco de orgullo y arrojo. Vuelvo a Full Metal Panic!, porque ahí, la evolución de un Sousuke que no sabía vivir de otra forma que no fuera un soldado a un ser humano era soberbia, aunque, vale, tuvo más espacio para ello en 12 novelas. Aquí no pediría tanto, pero un poco de esto sí.
La relación entre ambos también crece poco a poco. Cuando la chispa salta de verdad toca el clásico dilema entre deber y amor. Un romance prohibido de libro que nos creemos totalmente y lo sentimos muy real. Así llegamos a un final que me deja sin una idea clara de si me gusta o no. Quiero divagar un poco así que spoilers van. Lo primero a decir es que es el desenlace más lógico y racional con la trama: ambos completan el viaje, Fana se casará con Carlo volviéndose una emperatriz que, al parecer, hará mucho por acercar con la paz ambos reinos, y Charles desaparece de los registros de la historia porque como "bestado" no se merece ningún reconocimiento por el logro de llevar a cabo una misión imposible con éxito. No me jodas, pero tanto realismo me parece que está de más. Por no hablar que, como Emperatriz, Fana debería tener el poder de haber cambiado el destino de Charles, incluso poniéndolo como ejemplo de la unión positiva entre ambos reinos. Esto era una historia de ficción, podrían haber llevado la trama por cualquier lado y eligieron el más descorazonador posible. Nos tenemos que conformar con una frase final que dice: "Pero cómo terminaron sus vidas aún sigue envuelto en el misterio". No, hombre, no. No me hagas que me conforme con esa migaja de "Quizás...". O me dais algo más sólido en el epílogo u os vais a la porra. Fin de spoilers. Sólo por resumir diré que la mayor virtud de su final es, al mismo tiempo, lo que más me molesta personalmente porque me siento entre estafada e insultada por el epílogo.
De animación no hay mucho que decir. Se encargó el estudio Madhouse e hicieron un buen trabajo visualmente, con algunos cielos realmente preciosos y muy realistas y buenas coreografías de batallas aéreas. En el diseño de personajes, en cambio, la cosa queda más sencilla. Se ven bien y no hay momentos de sangrado de ojos, pero tampoco destacan especialmente. Un punto muy negativo es que Fana, al principio y durante buena parte de la película, lleva una melena larga. No sólo es una decisión muy estúpida que salga con el pelo corto en todas las imágenes promocionales porque es un destripe en toda regla sino que, encima, durante la película, el momento en que se lo corta, que debería estar cargado de simbolismo y fuerza... no está. Lo omitieron. Quien haya jugado al Final Fantasy IX en que se da una situación similar seguro que tiene grabado a fuego en la memoria el momento en que Garnet se lo cortó y todo lo que significó para su personaje.
En definitiva, una película que parte de elementos mil veces vistos pero que es sólida y funciona bastante bien, así que seguro que os da un rato de entretenimiento. No obstante, creo que puedo decir que esperaba más de ella, sobre todo en su recta final porque aunque tenga un buen desenlace de manera objetiva, subjetivamente me ha sabido a muy poco.