Amaranta Rojas.
La “revolución” se está volviendo una intriga personal. Una lucha entre intereses personales y desde esta trinchera de los personalismos, las cosas se juzgan “por la conducta funcional del pranato” tal y como lo asomó Toby en su reciente artículo. No descartemos que muy pronto Elías Jaua se nos presente como una salvación o una figura para escoger y salir de esto. Este proceder, según dice Toby Valderrama, se conduce a través de una mecánica: “el que se mete con mi pandilla, con mi jefe, lo ataco”; “el que pida cuentas, el que señale fallas, es mi enemigo”. Y así, como se dirige un pranato, a la macha, sin pensar mucho, se sumerge el país en este desastre”[i]. No deja de ser cierto y esto no excluye a Toby Valderrama que es parte (creo yo) de uno de los toletes de pranatos que existen. Así estamos. Desde hace un largo rato (muy largo) es un poco la mecánica que ha imperado dentro de la “revolución” y de algunos factores que fueron excluidos de esas. Hoy no están, no porque decidieron romper con esa línea cuando las cosas se tornaban muy falta de ética, sino porque los pranes se hacían incomodos entre ellos. El único que pudo salvarse de esta mecánica, fue Luis Tascón. Se vino, moral y éticamente por la calle del medio y salieron de él muy temprano expulsándolo. Otros aguantaron cayados y después que salieron de ellos, hablaron diciendo que los que se quedaron eran corruptos. No deja de ser verdad, pero lo que aguantaron cayados no dejan de serlo también. Por lo menos sabían y ya eso le da el estatus de cómplice. Hace poco, Diosdado se tragó a Eva Golinger[ii]. Ella tuvo la idea de opinar sobre la ida de Maduro a la Asamblea de la ONU y eso fue suficiente para que Diosdado se la tragara enterita y la acusara de ser agente del imperialismo. A Diosdado hoy no le luce bien Eva Golinger. Es así de simple. La opinión de Eva Golinger no le cuadra a Diosdado y él convierte esa diferencia personal en un asunto de importancia política. porque alimenta a los fanáticos que se están y esperan en las gradas. Eso mismo, pero con un poquito de más adorno hace Toby Valderrama. Rafael Ramírez es enemigo personal de Diosdado y Maduro y en consecuencia; Toby sale por su amigo Rafael Ramírez. Para Toby Valderrama, el desastre de PDVSA tiene más o menos un año. Tal vez unos días más, pero no es mucho. En un poco más de un año, PDVSA entró en el desastre. Fue con un huracán que apareció y destrozo todo. A mí se me es difícil entender la crisis del país si el desastre de PDVSA, pero a Toby Valderrama estas dos cosas son totalmente distintas. Una no tiene que ver con la otra. Es más, para Toby creo que PDVSA no alcanza el estatus de haber sido una empresa estratégica y los que pasaron por ahí desde hace un largo rato por acción y omisión no son responsables de ese desastre. ¿Dónde estaba Elogio del Pino por ejemplo? Así que Toby le echa bola a su nadilla. El que se mete con su pandilla y su jefe es su enemigo. Por eso, tal vez por eso; Toby Valderrama tiene al ministro Rafael Ramírez como posible presidente de la Junta Revolucionaria o la figura que vendría después del golpe que tumbara a Maduro[iii]. Como es un problema personal y de ajuste de cuentas; el golpe que Toby espera que llegue una madrugada de estas, sería la forma de ajustar cuentas con el otro pranato. Mira como es un problema personal, que hace apenas unos meses (30 de mayo, 2018), Toby Valderrama aspiraba a que llamaran a Rafael Ramírez para que asumiera la jefatura en PDVSA. Si el 30 de mayo, Toby deseaba esto, cómo es que Maduro y Diosdado son peores que Ramírez. El 30 de mayo, Toby sostuvo esto en un artículo: “Estamos seguros que el mismo día que Ramírez regrese, ese mismo día la producción subirá como la espuma, es que volverá la moral, los trabajadores sentirán el orgullo de pertenecer al músculo económico de la nación, se sentirán protegidos, sabrán que allá arriba está un hombre que es amigo, un conocedor de la empresa, un gerente probado. No hay otro en el país capaz de levantar la empresa. Y no vendrá sólo, tiene capacidad de formar equipo. Ese mismo día se reunirá con los obreros que tendrán acceso a él, visitará las áreas una por una escuchando, viendo, convenciendo. Los trabajadores sentirán presente al Comandante Chávez, volvió su espíritu, regresó el liderazgo”. Son tan parecido Toby y Diosdado que se siente que son imprescindibles. No hay duda, si de verdad quieren recuperar a la industria el primer paso será llamar a Ramírez, sólo esa medida evitará entregar la industria a los buitres capitalistas que sobrevuelan Miraflores”[iv] Si Hubiesen llamado a Rafael Ramírez, Toby Valderrama estaría cómodamente viajando por el país en jet privado dando lecciones revolucionarias y la corrupción no existiría ni en PODVSA ni otra parte. Rafael Ramírez, volvería con su equipo y tal vez llamaría a Pedro León y otros gerentes para que con su alta moral y ética, eleven la producción. El asunto es tan personal, que para Toby Valderrama, Rafael Ramírez todavía es ministro. O sea, todavía pertenece al equipo de Maduro. Si es ministro es porque está en el gobierno se siente en el gobierno. ¿Será que es ministro de un gobierno en el exilio y espera por una madrugada que lo despierte con un nuevo gobierno producto de un golpe? Amarantaroja063@gmail.com @La_DagaRoja REFERENCIAS[i] https://www.aporrea.org/actualidad/a270159.html [ii] https://www.aporrea.org/actualidad/n332399.html [iii] https://www.aporrea.org/ideologia/a270093.html [iv] http://elaradoyelmar.blogspot.com/2018/05/que-esperan-para-llamar-ramirez.html
amarantaroja063@gmail.com @La_DagaRoja