Todas las estaciones tienen su encanto particular. Hay personas que son como el otoño, frías por fuera pero cálidas como un chocolate caliente después de caminar bajo la lluvia. O personas que te llueven encima como un torrente de agua fría y te dejan calado hasta los huesos para siempre. Simplemente hay que saber apreciarlas.
Quién sabe, a veces la vida es viajar desde Francia a China en un pequeño barco pesquero con la intuición al timón. Y aunque en el camino las olas amenacen con hundir la embarcación, con suerte, Moisés abrirá el océano y alejará a las criaturas marinas.
Todas las estaciones tienen su encanto particular. Hay pe...
Publicado el 22 noviembre 2013 por MoreviTambién podría interesarte :