Título: Todo lo peor.Autor: César Pérez Gellida.Editorial: Suma, 2019.Páginas: 480.
SINOPSIS.
Varios cadáveres de homosexuales aparecen brutalmente asesinados en el Berlín Este de finales de la Guerra Fría. Las autoridades no le prestan la atención que merece hasta que un alto cargo de la Stasi que maneja información muy sensible para el Estado aparece muerto en las mismas circunstancias.
Por su experiencia en el comportamiento de la mente criminal, encargan la investigación a Viktor Lavrov, que, junto al inspector apartado de la Kriminalpolizei, Otto Bauer, buscará la manera de sumergirse en un mundo prohibido tras los pasos de un despiadado asesino mesiánico.
IMPRESIÓN PERSONAL.
Intento siempre acercarme a este autor de una forma neutra, sin que mi impresión positiva de novelas anteriores mediatice mi opinión sobre el libro que tengo en las manos. También lo hago con el miedo a que me decepcione alguna vez y me desinfle el mito. Pero va a ser que no, que el autor lo vuelve a repetir y me encuentro con una novela que se supera a medida que avanza una en su lectura.
César nos traslada al Berlín del Este en el año 81. Un asesino de homosexuales anda suelto. Cruel, sádico y despiadado a la vez que tan listo que ha pasado desapercibido hasta el momento. Solo cuando uno de los asesinados es un espía que ocultaba su condición sexual y que tenía la responsabilidad de custodiar a un importante científico que todas las agencias y países ansían encontrar, la Stasi y el KGB, encargan a Viktor, como criminalista, encontrar al asesino y al científico tan bien camuflado por su anterior protector.
Una novela vertiginosa que yo he degustado a pequeños sorbos, disfrutándola para ser capaz de identificar su propia grandeza y, sobre todo, la inteligencia con la que está escrita. No puedo imaginar como se puede hilvanar todo el entramado que he leído con tantos hilos de diferentes colores para que todo quede tejido como un todo y donde todas las piezas encajen, a la vez que nos muestra a unos personajes coherentes y humanos en su parte privada, mientras son capaces de actuar con tanta sangre fría cuando del trabajo se trata.
Espías que hacen de policías, policías que colaboran con espías, personas que intentan separar a diario ideologías, educación recibida, adoctrinamiento y engaños en un país donde la libertad de acción es incompatible con la libertad de pensamiento. Una vida fría en un verano caluroso en la que un asesino realiza su propia limpieza ideológica, a tono con el sistema en el que se ha criado. Sin duda, os la recomiendo. Ésta y todas las anteriores.