Todo Lo Que Debes Saber Sobre Una Contractura

Publicado el 16 noviembre 2018 por Carlosgu82

Las contracturas musculares son dolencias muy comunes en las personas, identificadas como nudos o inflamación en alguna zona del cuerpo (por ejemplo, el cuello o la espalda), que nos incomoda y no nos permite movernos con normalidad.

Pero ¿qué es exactamente una contractura? Se trata de una contracción brusca e involuntaria en la fibra muscular. Comúnmente suelen aparecer al hacer algún tipo de esfuerzo y entre los síntomas habituales se conoce el endurecimiento de la zona y la posterior aparición del dolor que altera el funcionamiento muscular y limitan nuestra actividad.

Causas de las contracturas musculares.

Muchas personas asocian las contracturas musculares como una dolencia que principalmente afecta a los deportistas, pero esto no puede estar más errado. De hecho, las personas sedentarias y con altos niveles de estrés son las más propensas a sufrirlas. Una de las razones es que carecen de tono muscular.

Entre las causas de las contracturas encontramos:

-Las posturas repetitivas que se sostienen en el tiempo, como por ejemplo, trabajar muchas horas sentado y con la cabeza inclinada, mirar todo el día el celular, etc.

Esfuerzos muy grandes a los que no estamos acostumbrados o posturas inadecuadas, como inclinarse mal y recoger algo muy pesado.

El frío, el cual muchas veces nos lleva, inconscientemente, a contraer el cuerpo y, al sostenerse largamente, puede causar una contractura.

-El sedentarismo, ya que al existir la falta de actividad los músculos se vuelven más propensos a sufrir lesiones.

-El estrés y las tensiones, que pueden llevarnos a tener reacciones que endurezcan alguna parte de nuestro cuerpo.

-La deshidratación y la falta de nutrientes en nuestro cuerpo, principalmente magnesio y potasio.

Para evitar sufrir contracturas es importante incorporar la actividad física y el estiramiento consiente en nuestra rutina diaria. Si sufrimos contracturas graves, tal vez se deba acudir a algún tipo de medicación, como analgésicos o antiinflamatorios, por lo cual siempre es mejor consultar con un especialista.