Todo sobre las varices.

Por Majesty Lab Majesty Lab @Majesty_Lab

Las varices son venas dilatadas que se inflaman y se elevan a la superficie de la piel. Pueden ser de un color morado o azul oscuro y parecer estar torcidas y abultadas. Las varices se encuentran comúnmente en las partes posteriores de las pantorrillas o en la cara interna de la pierna. Se desarrollan cuando las válvulas venosas que permiten que la sangre fluya hacia el corazón dejan de funcionar adecuadamente. Como resultado, la sangre se acumula en las venas y provoca las dilataciones.

Factores de riesgo

  • Obesidad: Unas piernas de contextura gruesa requieren mayor aporte sanguíneo por parte de las arterias, que luego tiene que ser drenado por las venas, lo que favorece la sobrecarga de estas y el fallo precoz.
  • Sedentarismo: La bomba impulsora del retorno venoso son la almohadilla plantar y los músculos de las piernas; como el sedentarismo no favorece la contracción muscular ni la puesta en funcionamiento de la almohadilla plantar, se provoca un mayor estancamiento de sangre y una mayor sobrecarga valvular, lo que facilita la aparición de más varices.
  • Trabajos prolongados de pie: Al igual que en el caso del sedentarismo, hay poco ejercicio muscular y, además, el sistema de retorno debe trabajar siempre en contra de la gravedad.
  • Anticonceptivos: Provocan retención de líquidos y también favorecen, de forma específica, el fallo de las válvulas de las venas reticulares. Muchas mujeres notan cómo los cambios hormonales a lo largo del ciclo cambian la morfología de sus venas y muchas de ellas tienen claro que, coincidiendo con la toma de anticonceptivos, empezaron a desarrollar telangiectasias (arañas vasculares).
  • Antecedentes personales o familiares de varices.
  • Antecedentes personales o familiares de trombosis venosa profunda.

Tratamiento.

  • Tratamiento quirúrgico: Tratar el síndrome varicoso y la insuficiencia de los cayados. El tratamiento clásico consiste en el Stripping de la vena safena más la extirpación de los paquetes varicosos existentes más la extirpación ligadura de los paquetes con venas perforantes o colaterales. Se han desarrollado tratamientos mínimamente invasivos, que no extirpan totalmente la vena safena, consistentes en la ligadura de los puntos en donde se fuga presión desde el sistema profundo al superficial.
  • Tratamiento esclerosante: Consiste en la inyección de un esclerosante para que se necrose la vena. Se usa sólo para varículas y pequeñas varicosidades, nunca en varices tronculares.
  • Tratamiento con microespuma esclerosante: Evolución del anterior, consiste en la punción de la variz e inyección de una microespuma esclerosante que anula la vena, haciendo que el propio organismo la anule. En la actualidad se tratan todo tipo de varices con este tratamiento, que se considera menos agresivo que la cirugía o el láser y no requiere postoperatorio.

El tratamiento esclerosante no deja cicatrices de ningún tipo y no necesita ningún tipo de cirugía, ni siquiera puntos. El paciente suele recibir una media de compresión que lleva durante algunos días. En algunos casos se producen recidivas, y se deben volver a esclerosar en otra sesión las recanalizaciones de la variz original. Está contraindicado para mujeres embarazadas e individuos que hayan pasado un período largo en cama.

  • Láser: Existen diferentes tipos de láser para cada caso:
  • Láser Transdérmico o Láser Estético:

Se utiliza para eliminar las pequeñas arañas vasculares y varices antiestéticas de forma rápida. Este láser permite incluso tratar manchas cutáneas sin dañar los tejidos, por lo que no provoca cicatrices. Es de fácil aplicación y en pocas sesiones permite eliminar todas las lesiones con una recuperación inmediata. No sólo es indoloro, si no que no daña los tejidos ni estructuras, no deja señales y no despigmenta la piel. Es un tratamiento atemporal, ya que se puede realizar en cualquier época del año. Sus resultados son inmejorables y se perciben a partir de la primera semana.

  • E.L.A.V. (Endo Laser Ablation Veins):

Se trata de un protocolo quirúrgico ambulatorio, mínimamente invasivo. Esta técnica permite eliminar las varices mediante micro incisiones que, en la mayoría de casos, no precisan puntos de sutura externos. Apenas provoca dolores postoperatorios al ser muy poco agresiva. Al sustituir el estiramiento y arrancamiento venoso por el cierre de la vena desde dentro, no lesiona las estructuras y tejidos de la pierna. Por ello, puede realizarse sin ingresar en la clínica y, según los casos, sólo bajo anestesia local.

Las ventajas de la técnica E.L.A.V:

  • Permite la eliminación y extirpación de todas las varices incluso de ambas piernas de una sola vez y de manera definitiva.
  • El paciente sale de la intervención caminando por su propio pie y puede reincorporarse a sus actividades cotidianas en una cuarta parte del tiempo,que cuando se operaban con las técnicas tradicionales.
  • Ausencia de las complicaciones que provocan las técnicas tradicionales de estiramiento y arrancamiento venoso: hematomas, dolor, lesiones nerviosas, cicatrices…
  • El resultado es visible a partir de la primera semana.

El uso de láser en el tratamiento de las venas varicosas puede mejorar el 90% de los casos. El procedimiento es menos invasivo que el quirúrgico y permite una recuperación más rápida. El uso del láser elimina la necesidad de extirpar las venas varicosas, como se hace con la técnica tradicional. El tratamiento con láser es adecuado para tratar varices de mayor tamaño en venas grandes, como la safena (safenectomía). La técnica consiste en introducir una delgada fibra óptica que recorre la vena afectada, la cual la va sellando a medida que la recorre lentamente, quedando la vena inutilizada.

  • Termocoagulación: Aplicación de calor en la vena para que se necrose. Sólo para varículas y pequeñas varicosidades.
  • Tratamiento médico: Para las molestias y varices asintomáticas. Se usan tónicos venosos.
  • Medidas fisiológicas: Como evitar el  sedentarismo, control de la obesidad y retención de líquidos, aplicación de medidas de compresión y elevación de extremidades inferiores.
  • Medidas caloríficas: Un tratamiento eficaz consiste en la interposición de frío/calor en las zonas más afectadas, además de masajes abdominales continuados.
  • Oxigenación Hiperbárica: La oxigenación en Cámara Hiperbárica combate el dolor y la inflamación, a la vez que provoca una mejor circulación sanguínea. Con esto proporciona al paciente una mejor calidad de vida.

¿Qué podemos hacer en casa?

Para paliar los síntomas y favorecer la circulación de retorno, en casa podemos:

  • Aplicar masajes ascendentes con una crema o gel de efecto frío.
  • Mantener las piernas en alto siempre que sea posible.
  • Dormir con una cuña ortopédica a los pies de la cama.
  • Caminar una hora al día.
  • Hacer bicicleta en el aire durante unos minutos (tumbada en la cama con las piernas elevadas, haz movimientos circulares similares al pedaleo).

No olvides seguirnos en Facebook, Twitter, Instagram y Google+ para no perderte ningún consejo  :)