"Todos los caballos del rey" es una rareza, una historia encantadora y delicada, muy sutil, sobre una pareja en la Francia de los '50 y su forma de entender el amor y de vivirlo. ¿Por qué no permitimos libertad a nuestras parejas? ¿Por qué no nos la permiten ellas? ¿Por qué nos sentimos tan inseguros siempre? (¿Por qué no hacer en cada momento sólo lo que se desea?)
Hay que entender este relato en el tiempo y lugar en que está escrito, en el ambiente político y cultural y sobre todo en las motivaciones de la autora para escribirla (se explica en el prólogo, buscaba financiación para la Internacional Situacionista). Pero a mí esto no me interesa tanto, hay que tener en cuenta que para bien o para mal, soy una romántica (yo no lo quise, no se me debe tener en cuenta).
(...) Cuando Gilles y yo nos fuimos, ellas seguían tocando, pero Gilles había quedado con Carole para la tarde del día siguiente.
Qué placer, ya cansada y un poco bebida, encontrarte, como en la canción, con una amplia cama blanca y dormir en ella con el chico del que estás enamorada. Por lo demás, también esa canción nos la había cantado la niña aquella, la de la felicidad para siempre jamás de un amplio lecho blanco, en cuyo centro es tan hondo el río que todos los caballos del rey podrían beber juntos. Éramos felices y estábamos muy enamorados. Enamorados de nosotros, enamorados de Carole, enamorados de una forma un tanto inconcreta; y, en verdad, era lo que tocaba entonces.
-¿Estás contento? -le pregunté a Gilles.
Asintió con la cabeza y me rodeó el cuello con el brazo. Yo también estaba contenta.
-¿Te gusta? -añadí.
Recibí la misma respuesta afirmativa. Era lógico. Porque, en fin, si a Gilles hubieran dejado de gustarle las mismas chicas que a mí, eso nos habría aportado un elemento de distanciamiento.
Geneviève y Gilles son una pareja en principio, hasta podría decirse, que convencional. Pero a veces se enamoran de otras personas, y a veces se enamoran a la vez de otras personas. Estas historias se van sucediendo y al final ahí están, ella y él, de nuevo. Por qué no serán las cosas así. En el mundo real, quiero decir. Por qué serán las cosas tan difíciles siempre.