Todos los que pedimos por la aparición con vida de Santiago Maldonado, o protestamos en contra de cualquier abuso de este gobierno, nos arriesgamos a ser perseguidos pero los artistas la padecemos de un modo especial dado que dependemos de la publicidad, del apoyo de un público sobre todo para quienes podemos llegar a trabajar con nuestro arte. Un triste ejemplo es lo que le pasó a la orquesta típica de Tango Fernández Fierro después de pedir por Santiago Maldonado la mitad de los espectadores se levantaron y se fueron. En palabras simples los artistas estamos arriesgando nuestra fuente laboral incluso en una red social pues como cualquier otro medio es un nexo con nuestro público. No obstante muchas veces corremos ese riesgo por un compromiso con nuestro país y con la humanidad misma. Muchos artistas comprometidos no se animan a decirlo pero hoy en día tienen menos apoyo que antes sin importar la categoría de cada uno. Sin ir más lejos yo mismo he notado como muchos que por defender a un gobierno que no les beneficia en nada, me han dado la espalda. Y muchos son artistas. Artistas que a pesar de su elección yo siempre los he valorado por su arte. Asimismo valoro muy especialmente a quienes muy a pesar de no estar de acuerdo conmigo me brindan su apoyo. Todo lo expuesto no tiene otro fin más que el de hacer conocer esta realidad, la de muchos artistas comprometidos con su pueblo.